¿Cómo la IA pondría poner en riesgo el 24% de los ingresos de autores musicales y audiovisuales para 2028?

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/ 4 diciembre 2024

De acuerdo a un informe pionero publicado por la CISAC, los creadores corren el riesgo de perder, de aquí a 2028, un 24 % de sus ingresos por los derechos de autor en el sector musical debido a la IA generativa

PARÍS- Los creadores están en riesgo de perder, de aquí a 2028, un 24 % de sus ingresos derivados de los derechos de autor en el sector musical y un 21 % en el sector audiovisual, debido a la de la industria cultural de la inteligencia artificial generativa.

Esto es lo que señala el primer estudio realizado a nivel mundial por la Confederación Internacional de Sociedades de Autores y Compositores (CISAC), con sede en París y que representa a más de 5 millones de creadores en todo el mundo.

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La investigación que midió el impacto económico por parte la inteligencia artificial en los sectores tanto de la música como el audiovisual estima que la IA generativa va a enriquecer a las empresas tecnológicas con lo que se pondrá en peligro primordialmente “los ingresos de los creadores humanos en los próximos cinco años”, precisa la CISAC.

Esta es una de las principales conclusiones del estudio encargado por la CISAC (Confederación Internacional de Sociedades de Autores y Compositores, que representa a más de 5 millones de creadores) y realizado por PMP Strategy”, afirma la Confederación Internacional de Sociedades de Autores y Compositores en su sitio web en un texto titulado “Global economic study shows human creators’ future at risk from generative AI”.

$!Taylor Swift en Toronto, Canada. La AI generativa pone a los creadores en riesgo de perder, un 24 % de sus ingresos derivados de los derechos de autor.

No obstante a que los ingresos de los proveedores de la generación de IA aumentarán en los próximos cinco años, precisa la CISAC, los creadores están peligro “de perder una gran parte de sus ingresos actuales debido al impacto sustitutivo de la IA en las obras creadas por humanos”.

Aún cuando son ellos, los creadores, quienes proporcionan “el combustible creativo del mercado de contenidos de la “generación de IA””, son ellos tanto del sector musical como el audiovisual quienes sufrirán una disminución en sus ingresos.

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Esto equivale a una pérdida acumulada de 22,000 millones de euros durante el período de cinco años (10,000 millones de euros en música; 12,000 millones de euros en audiovisual)”, afirma la la Confederación Internacional de Sociedades de Autores y Compositores.

Por lo que este pionero estudio concluye que el mercado de la música así como el de los contenidos audiovisuales que son creados a través de IA van a incrementarse “exponencialmente en los próximos cinco años”, es decir, “pasarán de los 3,000 millones de euros actuales a los 64,000 millones de euros en 2028”, detalla la la Confederación Internacional de Sociedades de Autores y Compositores.

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En opinión de Björn Ulvaeus, quien es el presidente de CISAC y también integrante del grupo ABBA, ”para los creadores de todo tipo, desde los compositores de canciones hasta los directores de cine, desde los guionistas hasta los compositores de música para películas, la IA tiene el poder de abrir nuevas y emocionantes oportunidades, pero tenemos que aceptar que, si se regula mal, la IA generativa también tiene el poder de causar un gran daño a los creadores humanos, a sus carreras y medios de vida”.

¿Cuál de estos dos escenarios será el resultado?” se cuestiona Ulvaeus, a lo que responde el integrante de ABBA, “esto estará determinado en gran medida por las decisiones que tomen los responsables políticos en las revisiones legislativas que se están llevando a cabo en todo el mundo en este momento. Es fundamental que acertemos con estas regulaciones, protejamos los derechos de los creadores y ayudemos a desarrollar un entorno de IA que salvaguarde la creatividad y la cultura humanas”.

Estas potenciales pérdidas de ingresos hasta 2028 tanto para los creadores de música como a los de contenido audiovisual equivalen a una disminución total de 22,000 millones de euros, en donde 10,000 millones de euros corresponde a los autores musicales y 12,000 millones de euros a los creadores audiovisuales.

Mientras que los ingresos para los proveedores de servicios de IA generativa se prevé sean de 4,000 millones de euros anuales en el sector musical y de 5,000 en el audiovisual.

Estos ingresos son derivados directamente de la reproducción no autorizada de las obras de los creadores y representan una transferencia del valor económico de los creadores a las empresas de IA”, resalta la CISAC.

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En lo que se refiere al sector de la música, estas tecnologías van a modificar mucho los mercados digitales, debido a que para 2028 se calcula que las creaciones no humanas van a representar el 20 % de los ingresos de las plataformas de ‘streaming’ y cerca del 60 % de los ingresos de las bibliotecas musicales.

Por otra parte, en el sector audiovisual los cambios también serán importantes y las áreas que se verán más perjudicadas van a ser las de la traducción y la adaptación de subtítulos, el informe prevé que habrá una posible disminución del 56 % de sus ingresos, en tanto que los guionistas y directores podrían ver una caída en sus ingreso entre un 15 % y un 20 %.

No obstante, a pesar de estas afectaciones para la industria, la CISAC considera que la cultura es capaz de lograr adaptarse, de la misma forma que lo lleva haciendo gasta ahora.

Por lo que la CISAC acentúa que, “en un marco regulatorio sin cambios, los creadores en realidad sufrirán pérdidas en dos frentes: la pérdida de ingresos debido al uso no autorizado de sus obras por parte de modelos de la generación de IA sin remuneración; y la sustitución de sus flujos de ingresos tradicionales debido al efecto de sustitución de los resultados generados por IA, que compiten con las obras hechas por humanos”.

Gadi Oron, quien es el director general de la CISAC explica “la CISAC encargó este estudio a PMP Strategy para demostrar el enorme valor que aportan las obras protegidas por derechos de autor a las empresas de IA de generación”.

Por lo que, prosigue Oron, “Sus conclusiones apuntan a una falla fundamental que se está abriendo en el mercado, ya que las obras de los creadores se están apropiando de forma injusta y poco ética para aumentar los ingresos de los proveedores de IA de generación, dejando a los propios creadores al margen de este crecimiento”.

Esto tiene un mensaje fundamental para los responsables políticos: deben actuar con urgencia para proteger a los creadores humanos, la cultura y la creatividad. Deben garantizar que los creadores humanos estén protegidos, puedan ejercer sus derechos legales y puedan exigir transparencia a los servicios de IA”, añade el director general de la CISAC.

Con estos principios consagrados en el entorno de la IA, esto puede ser beneficioso para los creadores y la industria tecnológica, en lugar de una amenaza para nuestra cultura y nuestro sector creativo”, concluye Oron.

Por su parte, la directora de cine y guionista Ángeles González-Sinde Reig además de ser la vicepresidenta de la CISAC, detalla que “este estudio pone de relieve la necesidad de unas políticas éticas y económicamente sólidas que sitúen los derechos de los creadores en el centro mismo del mundo de la IA”.

Siendo así, continúa González-Sinde Reig que “las herramientas de IA pueden apoyar profundamente nuestro trabajo como narradores de historias y cineastas”.

Sin embargo, concluye la la directora de cine y guionista “existe una enorme preocupación por la posibilidad de que, en la prisa por explotar y monetizar la IA generativa, los creadores sean tratados como algo secundario, sin derecho a autorizar los usos de su trabajo, sin la protección de las normas de transparencia y sin poder recibir una remuneración justa. No debemos olvidar que son los creadores humanos los que proporcionan el combustible del mundo de la IA y quienes deben estar en el centro de la formulación de políticas y la regulación”.

Con información de la Agencia EFE y Confederación Internacional de Sociedades de Autores y Compositores (CISAC).

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