Kaplicky: El futurista incomprendido

Vida
/ 18 abril 2017

Hoy cumpliría 80 años Jan Kaplicky, el arquitecto cuyos proyectos inspirados en el arte pop y la naturaleza fueron comprendidos por pocos

Hoy cumpliría 80 años Jan Kaplicky, el arquitecto que hasta su último minuto hizo temer a los conservadores por el anticuado paisaje de sus ciudades con estructuras que no le temieron al futuro, los materiales modernos y el impacto visual. 

El no dio lucha fácil pues ocho años atrás, Kaplicky murió por un ataque al corazón fulminante murió defendiendo el proyecto que más ilusión le hacía: la Biblioteca Nacional de Praga.

Jan nació el 18 de abril de 1937 en Checoslovaquia, donde estudió arquitectura en el Colegio de Arte, Arquitectura y Diseño Aplicados de Praga sin dejar de lado la influencia más grande que tuvo su trabajo: el oficio de ilustrador botánico que ejercía su padre.

Llegó a Londres en 1968 junto a su amigo Jaroslav Vokoun, dos pares de calcetines, 100 dólares y una visión en la que sus edificios debían ser la armonía perfecta entre naturaleza y la más alta tecnología.

Eso parecía incompatible pero poco a poco el arquitecto comenzó a llamar la atención de importantes diseñadores como Renzo Piano y Richard Rogers así como otras firmas que lo llevaron a fundar su propia firma Future Systems junto a su colega David Nixon.

Inspirado en la ciencia ficción, el arte pop y las amenazas del futuro, Kaplicky ideó cientos de proyectos soñadores como estructuras que orbitaban la tierra, casas de verano con forma de cápsulas de supervivencia que se podrían trasladar por helicópteros, puentes flotantes y edificios temporales entro otros.

Kaplicky llegó a ganar premios como el Stirling en 1999, el World Architecture Awards en 2001, el Premio de Arquitectura del Royal Institute of British Architects en 2004. 

En 2007 también ganó el concurso que se convocó para construir el edificio de la Librería Nacional Checa, lo que sería el primer gran proyecto en su país y lo que él declaró sería el evento más importante en su vida. Sin embargo, este diseño fue duramente criticado e incluso apodado “el pulpo”, lo que truncó la realización de este edificio por contrastar con la estética de Praga.

Kaplicky permaneció con la esperanza de la biblioteca se construyera con apoyos privados, poniendo tanto empeño en esta búsqueda que se mudó definitivamente a Praga para trabajar con mayor insistencia en ello y establecerse con su mujer Eliska Kaplicky. Finalmente, el 14 de enero del 2009, apenas unas horas después del nacimiento de su segunda hija Johanka, el arquitecto murió en una calle, para que después se aprobara esta construcción.

“No creo que tengas que ir a ningún lado en particular para ser creativo, eso es una excusa. Yo creo que la creatividad tiene mucho que ver con tu relación con otras personas, tus amigos, tu pareja o lo que sea. Tu felicidad o infelicidad se ven en tu trabajo, porque es un reflejo de tu estado emocional y son dos cosas que no se pueden separar”, dijo en 2002 el arquitecto.

$!Kaplicky: El futurista incomprendido

Biblioteca Nacional de Praga 

> El diseño hecho en 2005 que Kaplicky jamás pudo ver materializado porque sacó a todos de sus límites. Se trataba de un edificio de 8 plantas con una forma orgánica de medusa con 48 metros de altura. Pensando en la vocación del lugar, Kaplicky ideó un sistema de almacenamiento y recuperación de libros para administrar la colección de 4 millones de libros, áreas de lectura que optimizan el uso de la luz, todo bajo vidrio de tonos amarillos y morados. 

$!Kaplicky: El futurista incomprendido

Casa Hauer King 

> Jan estaba convencido de que un autor debería de tener la capacidad de integrar la arquitectura moderna en el contexto tradicional. Esta casa está construida por fuera con bloques hechos con fibra de césped, mientras que el costado del jardín es de bloques de cristal. Se trata de una unidad prefabricada con baños exportados e interiores hechos de carbono.

$!Kaplicky: El futurista incomprendido

Museo Enzo Ferrari 

> Kaplicky se inspiró en las tomas de aire de un carro de carreras. El monumental edificio fue pensado para recordar la carrocería de un coche con  una estructura redondeada y las luces del techo tienen forma de radiador. Es abundante en paredes transparentes y traslúcidas, su techo es de aluminio curvo y el exterior de vidrio estructural. A esto se suman muchos sistemas de ahorro de energía y geotérmica.

$!Kaplicky: El futurista incomprendido

Puente flotante de West India 

> Este muelle ubicado en Londres consta de 94 metros de longitud y una estructura inusual. El puente se apoya en pontones flotantes con cubierta de aluminio y pilas que controlan el movimiento vertical y una rampa que nivela el agua, sistema de compensas que recibió el Premio RIBA. Una parte del puente se eleva para permitir el paso a los barcos.

$!Kaplicky: El futurista incomprendido

Sala de prensa del Lord’s Cricket Ground

> El arquitecto sabía lo vital que era para el público londinense poder ver los partidos de cricket. Así, su firma diseñó este espacio con capacidad para 250 periodistas con todas las funciones necesarias.Está hecho de placas de aluminio de 5-15 milímetros de espesor y placas de vidrio curvo que reducen peligrosos reflejos al exterior. 

$!Kaplicky: El futurista incomprendido

Selfridges Birmingham 

> Este edificio marcó el futuro de los sistemas de construcción en su entonces. La fachada amorfa está cubierta por 30 mil discos de aluminio. La luz entra por el centro del edificio, donde hay escaleras mecánicas verticales. Estos almacenes se han convertido en un punto referencial y de encuentro para la sociedad industrial británica.

COMENTARIOS

TEMAS
NUESTRO CONTENIDO PREMIUM