Mitad de la Amazonía en riesgo de desaparecer en 2050 y alterar el clima de toda la Tierra

Vida
/ 19 febrero 2024

La mitad de la Amazonía podría desaparecer en 2050, concluyó un equipo internacional de investigadores después de evaluar los umbrales críticos que pueden provocar cambios profundos en la región que repercutirá en el clima gobal de la Tierra

MADRID- Los resultados de esta nueva investigación, liderada por la Universidad Federal de Santa Catalina (Brasil) y en el que participaron expertos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) de España, fueron publicados en la revista Nature; en el que entre las conclusiones más preocupantes resalta una: dos de esos umbrales, que corresponden a los niveles de deforestación y a la degradación del bosque amazónico, ya se han sobrepasado.

Los científicos consideran que entre las potenciales alteraciones dependerán de cinco factores principales; el aumento de la temperatura; la disminución de las precipitaciones; el aumento de la temporada seca; la intensidad de la estacionalidad de las lluvias; y la deforestación, en el que todos están relacionados ya sea de forma directa o indirectamente con el cambio climático, por lo que rebasar el punto de inflexión en cada uno de ellos podrán originar cambios tanto locales, como sistemáticos en la Amazonía.

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En este sentido, un comunicado publicado en sitio web del CSIC, calculo que para 2050 entre el 10 y el 47 % del bosque amazónico podría transformarse de forma irreversible y desaparecer. “El objetivo primordial era evaluar cómo de cerca o lejos estamos de sobrepasar los límites seguros planetarios en lo referente al bosque tropical continuo más grande del planeta”, explica Encarni Montoya, quien es investigadora del CSIC en Geociencias Barcelona y coautora del artículo.

Es por esta razón que los investigadores reiteran en que de originarse la desaparición de los bosques amazónicos, esta situación va a influir en la regulación climática del planeta, así como también en la pérdida de diversidad biológica y cultural a en el mundo.

Esta investigación que llevaron a cabo varios científicos, que fueron liderados por el brasileño Bernardo Flores, es derivado del primer informe científico sobre esta región, que se dio a conocer en la COP de Glasgow en 2021 a instancias del Panel Científico por la Amazonía, que es una iniciativa respaldada por la Red de Soluciones para el Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas.

UMBRALES NEGATIVOS YA FUERON SUPERADADOS

Esta nueva investigación titulada “Critical transitions in the Amazon forest system”, ubica como un punto de inflexión una “deforestación acumulada del 20 por ciento”, por lo que el equipo de científicos decidieron establecer el “límite seguro” en el 10 por ciento, no obstante, ya se superó en un 13 %.

$!Vista aérea de un sector de la amazonía peruana, en la provincia Datem del Marañon. Perú ha perdido 4.1 millones de hectáreas de superficie vegetal.

El Consejo Superior de Investigaciones Científicas, precisa que tomando en cuenta los actuales modelos relativos al calentamiento global, en la investigación se indica “que el umbral crítico de aumento de temperatura media a nivel global, en este caso, se sitúa en 2º C, estableciendo como límite seguro para el bosque amazónico 1.5 ºC. En cuanto a la reducción de las lluvias, el punto de inflexión se sitúa en los 1,000 mm de precipitación anuales, indicando como límite seguro .800 mm. El artículo establece, además, que no debería superarse el déficit de 450 mm de lluvia al año en los periodos de estación seca. En este caso, establecen como límite seguro 350 mm. Asimismo, proponen una duración límite de la estación seca, estableciendo el umbral crítico en los ocho meses y el límite seguro en cinco meses”.

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Así mismo, Flores detalla que el umbral crítico de aumento de temperatura media a en el mundo se ubica en 2 grados, por lo que establece como un límite seguro para el bosque amazónico de 1.5 grados. En lo que se refiere a la reducción de las lluvias, el punto de inflexión se encuentra en los 1,000 litros por metro cuadrado anuales, y fija como límite seguro los 1.800 litros.

En consecuencia a esta situación, los investigadores previnieron además, de que no debe superarse el déficit de 450 litros por metro cuadrado de lluvia al año en los periodos de estación seca, en este caso pusieron como límite seguro los 350 litros; y acentuaron que la duración límite que debe tener la estación seca, es decir, el “umbral crítico” en los ocho meses y mientras que el “límite seguro” en cinco, dio a conocer el CSIC.

El equipo investigador para este nuevo estudio, está conformado por más de 20 profesionales de centros de investigación y universidades de Europa y América, resalta la necesidad de trabajar para mejorar la integración de datos de campo o experimentales en las simulaciones. Por lo qu piensan que es fundamental avanzar tecnológicamente “en la integración de modelos robustos para simular diferentes variables que interaccionan entre sí y que pueden provocar retroalimentaciones y efectos en cascada”, explica el CSIC.

$!Foto tomada con un dron fechada el 08 de febrero de 2024 que muestra la selva amazónica dividida con una zona de cría de ganado.

En opinión de Montoya, esta investigación es importante para poder conocer lo cerca o lejos que está el bosque tropical más grande del planeta de sobrepasar los límites de seguridad.

Las aproximaciones presentadas en este estudio son muy conservadoras debido al desconocimiento de cómo los diferentes factores de cambio relativos al estrés hídrico y las características intrínsecas de los ecosistemas amazónicos interaccionan entre sí y aceleran o disminuyen las velocidades de cambio”, ecplicó Montoya.

En una entrevista concedida a la Agencia de Noticias EFE, Montoya, acentuó sobre el “efecto cascada”, así como cómo un factor, el de la deforestación, es capaza de elevar la potencia negativa de los otros, debido a que que la mitad de las precipitaciones que se registran en la cuenca amazónica provienen del agua reciclada de forma natural en la misma cuenca.

Por lo que investigadora del CSIC, considera a los bosques amazónicos como los “refrigeradores” del planeta, además tambien de colosales sumideros del dióxido de carbono, que es el principal responsable del cambio climático, por lo que Montoya alertó de que su degradación va a imposibilitar que continúa actuando como “una bomba de agua”, por un lado y por otro, como un “succionador” de dióxido de carbono, y que de sucerder lo contrario aumentarían los efectos del cambio climático.

Como bosque tropical continuo más extenso del planeta, lo que pase en la Amazonía tiene y tendrá repercusiones a escala global debido, entre otros factores, a su papel de regulador climático”, preciso Montoya en el comunicado del CSIC.

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POSIBLES CONCECUENCIAS CLIMÁTICAS Y SOCIALES

La investigadora de CSIC, detalla que para lograr reducir las potenciales consecuencias negativas, así como eludir la desaparición de la Amazonía hace un exhorto a la responsabilidad local e internacional. “Además de desarrollar políticas de restauración y conservación a nivel local para desacelerar la degradación, se deben tomar ya acciones a nivel supra gubernamental, en la esfera política global, encaminadas a la disminución de la emisión de gases de efecto invernadero, así como para evitar o disminuir la sobreexplotación de los recursos naturales”, aseguró Montoya.

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Montoya hace incapié en que la pérdida de diversidad biológica y cultural que involucra la desaparición de los bosques amazónicos, no sólo por su papel de “regulador climático” en el planeta, también dibido a que en la Amazonía habitan 42 millones de personas, incluyendo 2.2 millones de indígenas y comunidades locales que pertenecen a unas 400 etnias y culturas diferentes.

Son los vigilantes; son los que tienen el conocimiento tradicional; viven, conocen y usan de manera sostenible los bosques amazónicos”, expresó Montoya a EFE y aseguró que no pueden quedar fuera de la gestión, debido a que el sistema amazónico lo conforman nueve fronteras geográficas y nueve países con gobiernos diferentes.

Si las personas no están implicadas no se llegará a buenos resultados, porque las poblaciones indígenas son los principales protectores del bosque amazónico”, explicó Momtoya.

Con información de la Agencia EFE y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).

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