Asesina a su gemela, culpa a la depresión postparto pero habría sido por un triángulo amoroso

Internacional
/ 22 noviembre 2019

A pesar de que Amanda Ramírez afirmó no recordar lo que condujo a la pelea, las autoridades dijeron que un triángulo amoroso pudo haber causado la disputa

Estados Unidos. Una mujer que apuñaló a muerte a su hermana gemela ha sido sentenciada a seis años por asesinato. Amanda Ramírez, de 27 años, admitió haber matado a su gemela, Anna, durante una pelea frente a su casa en Camden, Nueva Jersey, en junio.

La policía atribuye la discusión a un triángulo amoroso. Sin embargo, Ramírez le dijo el jueves al Tribunal Superior de Nueva York que no recuerda por qué lo hizo. 

"Sé que no hay nada que pueda decir para justificar lo que hice. Solo quiero dejar en claro que nunca tuve la intención de quitarle la vida a mi hermana gemela", explicó entre lágrimas.

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"Si pudiera recuperar lo que hice, lo haría en un instante. Tener que vivir con el hecho de que ya no está viva es devastador. Solo quiero disculparme con mi familia por haberles hecho pasar esto. Espero que todos puedan perdonarme", añade.

Ramírez inicialmente negó haber apuñalado a su hermana afuera de un complejo de apartamentos en Camden el 22 de junio. Pero luego admitió el apuñalamiento, alegando que había actuado en defensa propia después de que su hermana tomó un cuchillo y la atacó.

Ramírez explicó también que el apuñalamiento ocurrió después de una noche de consumo excesivo de alcohol y agregó que no puede recordar por qué ella y su hermana comenzaron a pelear.

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A pesar de que Ramírez afirmó no recordar lo que condujo a la pelea, las autoridades dijeron que un triángulo amoroso pudo haber causado la disputa. Otra hermana, Monika Medina, de 19 años, ha afirmado que las gemelas "nunca pelearían por un hombre". Discutían como perros y gatos, pero se mantenían unidas", dijo al New York Post en junio.

El vínculo de Amanda y Anna era muy  estrecho. "¡Eran inseparables! Amanda tiene su propia pareja y Anna también'', manifestó Medina.

Ramírez le ofreció a la policía muchas historias diferentes cuando fue interrogada, entre ellas que sufría depresión postparto. Pocas horas antes de que mataran a Anna, las hermanas subieron una foto en Facebook donde se mostraban sonrientes, posando junto a dos amigas.

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