Ignacio López Tarso: Honesto, cuerdo y divertido

Vida
/ 5 noviembre 2017

El actor platicó con nosotros sobre su visita a la ciudad, recordó anécdotas de su vida, y compartió su sentir sobre el teatro nacional. El miércoles llega con la puesta en escena ‘El Padre’, sobre un hombre con Alzheimer

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‘El Padre’
¿Cuándo?: Miércoles 8 de noviembre
¿Dónde?: Teatro de la Ciudad Fernando Soler
Horario: 19:15 y 21:15 horas
Boletos: 440, 550 y 660 pesos
Informes: 4121947

 

Al teatro le sacatean por el precio, porque piensan que es aburrido, porque creen que la diversión está en lo más superficial, en las películas de gran velocidad, está de moda lo rápido y furioso, y las películas que no son rápidas y furiosas no le gustan a nadie", dijo el actor Ignacio López Tarso en entrevista para VANGUARDIA. Del otro lado del teléfono se mostró honesto, y a la vez contento de regresar al “Fernando Soler”, teatro que describió como “muy bonito y cómodo”. El actor se presentará el miércoles con la puesta en escena “El Padre”, al lado de Erika Buenfil, Lisardo, Sergio Basañez, Lucero Lander y Adriana Nieto, en dos funciones: a las 19:15 y 21:15 horas.

Sobre esta historia, en la que le da vida a Andrés, un hombre que padece Alzheimer dijo: “estoy seguro que por lo menos a la mayoría del público le va a gustar mucho”. “El Padre”, del dramaturgo Florian Zeller, es dirigida por Salvador Garcini, con quien López Tarso ha trabajado en diversas ocasiones. Ahora, el actor de 92 años visita la ciudad con este proyecto y está convencido de que “el público de Saltillo está acostumbrado al teatro”. Así, platicó con nosotros sobre varios aspectos de su vida, y dejó en claro que contrario al personaje que intepreta en “El Padre”, él recuerda todo como si fuera ayer.

- ‘El Padre’ ¿nos va a divertir, o nos va a hacer llorar?-
“Las dos cosas, hay situaciones muy graciosas, muy divertidas, el 80 por ciento de la obra es en tono de franca comedia, para reírse mucho, la gente la pasa muy bien, y luego ya al final tiene algunos toques emotivos, y viene la tragedia, de manera que el público tiene como divertirse y como ver algo sobre la vida en general, es una enfermedad que lesiona mucho y que por desgracia es muy frecuente, el Alzheimer... no me gusta hablar de eso. Al público yo le digo de anticipo que es una obra divertiva y emotiva. Primero te da diversión, y luego te da algo en qué pensar. En una buena fórmula, reír y llorar (risas)”.

- Durante el proyecto de ‘Un Picasso’, tuvo que ser operado, ¿Cómo se ha sentido?-
“Sigo con Picasso, saliendo al interior de la República, tengo varias funciones, y estoy mezclando las dos obras al mismo tiempo, ‘Un Picasso’ es una obra cómoda, atractiva, bonita, interesante, habla de una anécdota de Plablo Picasso con una mujer muy guapa. Y ‘El Padre’, como le digo, es divertida y es emotiva, la verdad es que estoy muy contento, estoy muy bien, cómodo en las dos obras”.

-Participó en ‘Aquí en la Tierra’, un proyecto de Gael García Bernal para HBO que verá la luz el próximo año-
“Pues ya lo filmé, fueron dos escenas pequeñas, mi participación no es muy importante... es un personaje importante porque es un expresidente, es un hombre que anda en complicaciones de corrupción y eso, y eso nada más. La serie no la conozco, yo tuve nada más dos llamados, trabajé dos días para esa serie, grabé cada día dos o tres escenas y eso fue todo... con Giménez Cacho, con el estuve en las escenas, muy agusto. Es un personaje que tiene autoridad y que todavía tiene mucha influencia”.

-Usted fue seducido por la actuación a temprana edad. Luego de su trayectoria se ha preguntado ¿qué sería de usted, si no fuera actor?-
“No, no sé, no he pensado qué hubiera sido de mí si no hubiera sido actor (risas), ni idea, ¡qué bueno que fui actor!, porque estoy muy contento y muy satisfecho, me ha ido muy bien”. 

$!Ignacio López Tarso: Honesto, cuerdo y divertido
El 80 por ciento de la obra (‘el padre’) es en tono de franca comedia, para reírse mucho, ya al final tiene algunos toques emotivos y viene la tragedia, de manera que el público se podrá divertir y aprender algo sobre la vida en general con situaciones muy emotivas”,

-La gente reconoce su pasión y entrega, ¿Cómo ve en las nuevas generacioens el respeto por la actuación?-
“Hay de todo, como siempre, en las nuevas generaciones hay actores muy buenos, regulares y malos, igual que anteriror, igual que pasará en generaciones posteriores, siempre da lo mismo. Es una condición del ser humano”. 

-Ha trabajado para televisión, cine y teatro, ¿Tiene algún favortio?-
“Siempre que haya un buen personaje y una buena historia que contar, está muy bien tanto en cine, teatro o televisión, siempre que sea algo divertido, algo interesante... Prefiero el teatro por la cercanía y la reacción inmediata del público, eso es muy provechoso para el actor, es muy interesante y es una recompensa inmediata. Al trabajar viendo la cámara, uno sabe que detrás  puede haber miles o millones de espectadores, pero como no están presentes es un acto mucho más frío, implica mayor concentración física el imaginar ese público que no está ahí, en el teatro ahí lo tienes lo oyes respirar, lo oyes reírse, lo oyes gemir, aplaudir, protestar, que eso no me ha tocado todavía. Cuando fui espectador de teatro en España, por ejemplo, me tocó un público al que no le gustó la obra que estábamos viendo y empezó a protestar, pararon la representación y golperaron las butacas y se largaron... yo dije el público de México no hace estas barbaridades, pero nunca me ha tocado un público que proteste por lo que hago".

-¿Cómo recuerda a Xavier Villaurrutia? Personaje que lo impulsó a que actuara-
“Fue mi primer maestro de teatro, era buen maestro, pero era mejor como poeta. Recuerdo muy bien, él murió siendo yo su discípulo, él tenía 47 años de edad, muy joven, murió en plenitud de su capacidad intelectual, de su capacidad como poeta, él hubiera dado muchísimo más, fue de esas muertes inesperadas, en diciembre de 1950. Me trató de una manera muy especial, yo me metí a la escuela de teatro de curioso, me metí a su clase a escondidas y él me invitó a quedarme, me dijo ‘tú tienes cualidades como actor, quédate en mi clase, y yo te iré guiando’. Me enseñó a tener respeto al escenario, a tener respeto a la obra de teatro, me enseñó a tenerle respeto al trabajo del actor y al público, así como a los compañeros. Repito, era mejor poeta que maestro (risas)”.

-Otro personaje que forma parte de su vida es Gabilondo Soler ‘Cri-Cri’, a quien recordamos el mes pasado por su natalicio, y a quien le dio vida en la pantalla grande-
“Lo mejor de la película fue haber conocido a Gabilondo Soler, me invitó alguna vez a su casa a conocer a su familia, un hombre formidable como ser humano y un hombre muy inquieto por la ciencia, por saber cada día más, era un gran investigador, era un hombre muy estudioso, y hacía sus canciones y las disfrutaba mucho, tenía grandes inquietudes como astrónomo, como observador del universo, seguramente para él era un gran placer, tenía en su casa un laboratorio, un gran telescopio, gran parte de su vida la pasaba observando las estrellas y de eso sabía mucho. Era un hombre muy cordial y amistoso, tengo muy buenos recuerdos de él. De la película también recuerdo a Marga López que era un compañera estupenda”. 

-¿Hay algún personaje que le gustaría interpretar?-
“Los que estoy haciendo me gustan mucho, los que he hecho ya son muchos, muy buenos personajes... de los griegos, del siglo de oro español, Shakespeare, Moliere, de los grandes autores modernos, autores mexicanos, de Leñero, Hugo Argüelles, Carballido, de Sergio Magaña, personajes magníficos que recuerdo mucho, y que me han dado una gran satisfacción... Edipo, Otelo, Macbeth, el personaje de ‘Dos Hombres en Pugna’, el Pablo Picasso, el Pablo Neruda, en fin... todos esos personajes me han dejado muy buenos recuerdos”.

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