Pélaez 'manda a volar' a jugador del Cruz Azul, días antes del juego de Vuelta contra Rayados
El director deportivo de La Máquina decidió despedir al jugador celeste después de que pidiera más minutos de juego
No todo es miel sobre hojuelas en el seno de Cruz Azul.
A pesar de haber llegado sólido a las Semifinales del Apertura 2018, La Máquina cayó 1-0 en el BBVA Bancomer ante Monterrey y no sólo eso, sino que también ya sufrió la pérdida de un jugador que en el Clausura pasado era pieza fundamental en el esquema de Pedro Caixinha.
El mediocampista argentino, Walter Montoya, será el primer jugador transferible del cuadro Cementero, luego de tener una reunión con el director deportivo del equipo capitalino, Ricardo Peláez y expresar su repudio por sólo acumular cinco juegos disputados (95 minutos) en lo que va de la campaña con el club y ya no ser contemplado para el mandamás portugués.
Montoya llegó desde del Sevilla de La Liga Santander como uno de los fichajes "bomba" de la institución para la anterior campaña y no sólo eso, el pampero usaba la jersey con el dorsal "10", por lo que sorprende su salida del club, a días de que se dispute el juego de Vuelta ante los Rayados.
Según el medio deportivo ESPN, el jugador no hizo el viaje a Monterrey para la Semifinal de Ida ante Rayados debido a molestias musculares, aunque Montoya había practicado al cien por ciento el lunes e, incluso, había convertido cuatro goles en el interescuadras siete contra siete.
Sin embargo, también informa ESPN, dijeron que el mediocampista de 25 años se encontraba en buen estado físico, pero ante la falta de regularidad y de minutos, mostró su descontento con el cuerpo técnico y, por ello, no habría sido tomado en cuenta para el viaje a la Sultana del Norte.
Montoya firmó un contrato, de varios años, en enero de 2018 en una transferencia cercana a los 140 millones de pesos, pero el elemento cementero sólo pudo convertir un gol en 27 partidos (1,197 minutos) entre Liga y Copa durante los torneos Clausura y Apertura 2018, por lo que acabó con la paciencia de Peláez y Caixinha.