Rosberg busca aprovechar sanción de Hamilton

El alemán Nico Rosberg buscará encadenar en el Gran Premio de China su sexta victoria consecutiva en la Fórmula 1 y ampliar su ventaja en el campeonato sobre el británico Lewis Hamilton, quien deberá comenzar la carrera en Shanghai con cinco posiciones de retraso por una penalización.

El piloto germano parte como claro favorito en el tercer Gran Premio de la temporada tras imponerse en Australia y Bahrein, éxitos que se suman a los tres triunfos seguidos que logró en el final del 2015. Pero sobre todo por la sanción de Hamilton, su compañero en Mercedes, castigado por cambiar la caja de cambios en Bahrein.

"Es fantástico comenzar la temporada de forma tan positiva. Pero estoy afrontando las cosas paso a paso, carrera a carrera. Es importante disfrutar momentos así", dijo Rosberg, que aspira a conseguir esta temporada su primer título mundial tras ser subcampeón los dos últimos años.

Pese a la sanción de Hamilton, Rosberg considera que el británico será un rival de cuidado en la carrera. "Cuento totalmente con Lewis. En esta pista es posible sobrepasar, así que podrá luchar por la victoria".

De lograr el triunfo en China, Rosberg podría batir finalmente a Hamilton en una estadística y superar la racha de cinco triunfos consecutivos que el triple campeón mundial logró en 2014. El récord está en manos del alemán Sebastian Vettel, que logró nueve victorias seguidas en 2013.

Pese a los problemas que está atravesando en el inicio de la temporada, Hamilton se muestra optimista de poder recuperar terreno.

"Si después de dos malas carreras aún así obtienes dos podios, eso augura cosas muy buenas", dijo Hamilton. El británico confía en que Shanghai, donde es dueño de un récord de cuatro victorias, marque un "punto de inflexión" en la temporada.

Tras ser segundo en Australia y tercero en Bahrein a pesar de salir desde la pole en ambas carreras, Hamilton suma 33 puntos en el campeonato y escolta a Rosberg, líder con puntaje perfecto de 50.

Más rezagado se encuentra el alemán Vettel, quien parecía estar llamado a disputar la hegemonía de los Mercedes con su Ferrari, pero que en las dos primeras carreras suma un tercer puesto y un abandono.

El cuatro veces campeón mundial sufrió un duro golpe en Bahrein, donde debió abandonar antes incluso de tomar la salida por un problema en el motor de su Ferrari en la vuelta de calentamiento. "Esas cosas pasan. Fue un pequeño defecto con grandes consecuencias", lamentó Vettel.

El Gran Premio de China podría marcar además el regreso del español Fernando Alonso, que hoy superó un primer examen médico en Shanghai tras el brutal accidente que sufrió hace casi un mes en Australia.

El piloto de McLaren, no obstante, deberá someterse mañana a un nuevo chequeo después de los primeros entrenamientos libres. El resultado de ese análisis decidirá si los médicos de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) le dan la luz verde definitiva al español.

Otra novedad el fin de semana será el regreso al antiguo formato de clasificación tras las enormes críticas que generó el nuevo sistema introducido este año. "Deberían hacer la Fórmula 1 más sencilla", reclamó hoy Vettel, resumiendo el sentir de pilotos y escuderías después de torcer el brazo a Bernie Ecclestone, el "patrón" de la Fórmula 1 y uno de los impulsores de la cuestionada clasificación.