6 mil niñas y adolescentes se convirtieron en madres en el último año en Coahuila

A pesar de que en 2022 se registraron cifras ligeramente más bajas que en años anteriores, el fenómeno del embarazo y la maternidad en niñas y adolescentes sigue siendo una preocupante constante en el Estado de Coahuila.

Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el año pasado reportó alrededor de 6 mil niñas y adolescentes que se convirtieron en madres. Un dato alarmante es que, en algunos de estos casos los progenitores son hombres de más de 30 años, mientras que las jóvenes tienen menos de 15 años, agravando aún más esta problemática.

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El Inegi informa que en 2022 se registraron 5 mil 782 nacimientos en los que la madre tenía entre 15 y 19 años, y otros 137 casos en los que las madres eran menores de 15 años. Esto da un total de 5 mil 919 casos de madres menores de 19 años.

Aunque la cifra más alta de maternidad se observa en jóvenes de 15 a 19 años, se ha detectado la alarmante tendencia de padres mayores de 30 años en al menos 2 casos que involucran a menores de 15 años. En uno de estos casos, el padre tenía entre 30 y 35 años en el momento del nacimiento, y en el otro, tenía entre 35 y 39 años.

Saltillo y Torreón destacan como los municipios con más casos de niñas que se han convertido en madres, registrando 26 y 25 casos, respectivamente. Incluso en la capital del Estado, se documentaron casos de niñas de 12, 13 y 14 años que se convirtieron en madres durante el año pasado, y en muchos de estos casos, los progenitores son adultos.

La situación no mejora en el rango de edades de 15 a 19 años. Saltillo y Torreón continúan siendo los municipios con más casos, con mil 294 y mil 145 respectivamente. Además, se han identificado 14 casos en los que el progenitor es un hombre mayor de 50 años y la madre es menor de edad, lo que constituye un delito, incluso si el progenitor se hace responsable de los gastos, lo cual es una obligación legal.

Es importante destacar que la ley no exime de responsabilidades legales a los adultos en estas situaciones. Cuando existe un “acuerdo” de ambas partes para mantener relaciones sexuales, se considera estupro. Este delito se configura cuando se convence a un joven mayor de 12 años pero menor de 18 de tener relaciones sexuales a través de engaños y manipulación.

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Este problema, en muchas ocasiones, lleva a los familiares de las jóvenes a tomar medidas extremas, como el matrimonio a temprana edad. Sin embargo, esto también es un problema, ya que tanto las jóvenes como los futuros padres no están preparados para asumir las responsabilidades que conlleva tener una familia, lo que agrava aún más la situación.

Para abordar esta problemática, diversas organizaciones que defienden los derechos de niñas, niños y adolescentes han enfatizado la importancia de una educación sexual adecuada. La falta de información es un factor determinante en muchos de estos casos, lo que lleva a jóvenes a enfrentar desafíos significativos en su desarrollo emocional, físico y profesional al convertirse en madres a una edad temprana.