Coahuila: ¿Por qué fallamos siempre con los propósitos de Año Nuevo?

Al inicio de un nuevo año en Coahuila, es una tradición que las personas establezcan propósitos con el objetivo de mejorar diversas áreas de su vida, que pueden abarcar desde el aspecto físico hasta la salud o una mejora financiera. Sin embargo, muchos de estos propósitos son abandonados con el paso de los meses.

En este sentido, la psicóloga Ana Berenice de la Peña señaló que la principal razón por la que las personas no logran alcanzar sus objetivos radica, en muchos casos, en la falta de una planificación adecuada. Aunque los propósitos surgen de deseos genuinos, al carecer de un plan concreto, se convierten en deseos vagos.

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Para lograrlo, consideró que es necesario, antes de hacer una lista de propósitos, llevar a cabo un análisis de lo que se requiere para cumplirlos y, con ello, determinar si son metas alcanzables y realistas que permitan mejorar como persona.

Como primer paso, indicó que es importante plasmarlos en papel, ya que al tenerlos por escrito, las metas comienzan a tomar forma y se hacen más tangibles.

”Cuando los sueños están solo en nuestra mente, son simplemente deseos. Pero cuando los ponemos en papel, se convierten en ideas concretas, y si les damos objetivos específicos, se transforman en proyectos”, explicó.

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Para facilitar el proceso de alcanzar los propósitos, la psicóloga recomienda poner plazos específicos para cada meta y tener un plan B en caso de que el primer plan no funcione.

Además, De la Peña sugiere calendarizar los planes para dar un seguimiento constante de los avances, lo que ayuda a mantener la motivación para seguir trabajando en ellos. También aconseja poner plazos específicos para cada meta y tener un plan B en caso de que el primer plan no funcione.

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En muchos casos, alcanzar ciertas metas puede requerir ayuda externa, como el apoyo de un amigo o incluso la orientación de un profesional. Por ejemplo, si uno de los propósitos es mejorar la salud física, recomienda buscar el apoyo de un nutriólogo o un entrenador personal, además de investigar sobre opciones de gimnasios y horarios.

De la Peña también enfatizó que los propósitos no deben centrarse solo en el ámbito físico o material. Es crucial que incluyan metas relacionadas con la salud emocional y mental, ya que el bienestar general influye directamente en la capacidad de una persona para cumplir otros objetivos.