INAH ve difícil dar con saqueadores de cueva funeraria en Ocampo
El INAH confirmó el hallazgo de una cámara funeraria con restos humanos y textiles prehispánicos en una cueva de Ocampo
El delegado del Instituto Nacional de Antropología e Historia en Coahuila, Francisco Aguilar Moreno, informó que aunque se espera que las autoridades hagan lo propio, será complicado dar con los responsables del presunto saqueo que sufrió una zona protegida que fue encontrada recientemente en el municipio de Ocampo, Coahuila.
Fue el pasado martes cuando el INAH en conjunto con la Asociación Coahuilense de Espeleología reportaron el hallazgo de una pequeña cámara semicircular al interior de la cueva, encontraron restos óseos humanos mezclados con fragmentos de textiles antiguos, entre cestos y petates deteriorados.
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RECUPERAN RESTOS DE MÁS DE 500 AÑOS EN CUEVA DEL DESIERTO
El hallazgo se dio tras recibir el reporte ciudadano del que derivó la activación del INAH y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas sobre un protocolo de atención que permitió ubicar y rescatar un conjunto de materiales arqueológicos que datan de más de 500 años de antigüedad, característicos de las culturas del desierto.
De acuerdo con el arqueólogo Yuri de la Rosa, encargado de la intervención, los cuerpos habían sido depositados en bultos mortuorios envueltos en textiles, como parte de rituales de las poblaciones cazadoras-recolectoras que habitaron la región; sin embargo, el saqueo alteró significativamente el contexto original.
Por su parte, la antropóloga física Eva Zamarrón, identificó al menos 17 individuos entre adultos y niños, incluidos cinco cráneos infantiles, además de más de una decena de fragmentos textiles prehispánicos que podrían aportar información sobre los rituales funerarios de estas culturas.
Aunque dichas instituciones procedieron a interponer la denuncia ante la FGR por la violación del espacio y el saqueo arqueológico, Aguilar destacó que será complicado dar con los responsables del saqueo, debido a que existen pocos indicios.
“Presentamos las denuncias contra quien resulte responsable, pero la verdad es muy difícil que se dé con el responsable”, señaló el delegado.
Los materiales recuperados fueron trasladados al Museo Regional de La Laguna, en Torreón, para su limpieza, conservación y análisis detallado. Paralelamente, la cueva mortuoria quedó inscrita en el catálogo nacional de sitios arqueológicos registrados por el INAH, con el objetivo de reforzar su protección y evitar nuevos actos de saqueo.
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