La falta de sueño en empleados puede costar millones a las empresas

Una noche de mal descanso no solo afecta la salud de los colaboradores, sino que también puede traducirse en pérdidas millonarias para las empresas.

“El sueño no es un lujo, sino un pilar fundamental de la salud mental. Las empresas que priorizan la higiene del sueño en sus estrategias no solo mejoran la calidad de vida de sus colaboradores, sino que también optimizan su rendimiento y reducen costos asociados a la fatiga”, afirma Nancy González, psicóloga del Hub de Affor Health en México, empresa especializada en gestionar y mejorar la salud psicosocial en las organizaciones.

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El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Coahuila ha enfatizado la importancia de dar prioridad al sueño como un pilar fundamental para mantener una buena salud.

Dormir bien no solo mejora el estado físico y mental, sino que también influye en el rendimiento diario, la concentración y el bienestar general.

Un sueño reparador es esencial para que el cuerpo recupere energía, el sistema inmune se fortalezca y los músculos se relajen, según explicó el médico familiar Juan Carlos Álvarez Treviño, adscrito a la Unidad de Medicina Familiar No. 88 del IMSS.

Durante el sueño, el cerebro organiza la información adquirida durante el día, consolidando la memoria y mejorando el aprendizaje.

La falta de descanso impacta directamente en la concentración y en la toma de decisiones. Un estudio del Observatorio Europeo de Riesgos revela que incluso periodos breves de exposición al estrés y otros factores psicosociales pueden provocar alteraciones del sueño, cambios de humor, fatiga, dolores de cabeza e irritabilidad estomacal.

En el ámbito económico, el Foro Económico Mundial estima que la falta de sueño puede ocasionar la pérdida de hasta el 3 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) de un país. Asimismo, la National Sleep Foundation señala que el 58 por ciento de los trabajadores reconoce que dormir poco afecta negativamente su productividad.

¿PUEDEN LAS EMPRESAS FOMENTAR LA HIGIENE DEL SUEÑO?

Las organizaciones pueden jugar un papel crucial en la mejora del descanso de sus empleados. Implementar estrategias enfocadas en la higiene del sueño no solo crea un ambiente laboral más saludable, sino que también mejora la eficiencia y el desempeño general.

De acuerdo con Affor Health, estas son algunas acciones clave que las empresas pueden adoptar:

Evaluaciones psicosociales para identificar factores de riesgo: Realizar diagnósticos sobre carga de trabajo, presiones excesivas u horarios permite detectar las causas del estrés que afectan la calidad del sueño. Las encuestas de clima organizacional y herramientas de evaluación psicosocial ayudan a diseñar estrategias preventivas.

Capacitación en salud mental y regulación emocional: Desarrollar talleres y programas de formación que concienticen a los colaboradores sobre la importancia de la salud mental y su impacto en el rendimiento laboral.

Prevención del burnout y manejo del estrés: Identificar señales tempranas del síndrome de burnout, como fatiga crónica, alteraciones del estado de ánimo y dificultades de concentración, es fundamental. Implementar programas de atención a empleados que faciliten el acceso a especialistas en salud mental puede ser clave para prevenir estos problemas.

Estrategias de desconexión digital: Establecer políticas que limiten el envío de correos electrónicos y otras actividades laborales fuera del horario de trabajo, además de promover pausas cognitivas, ayuda a reducir la hiperactivación mental y facilita un sueño más profundo y reparador.

“La calidad del sueño de nuestros colaboradores es un factor determinante en el éxito de las empresas. Reconocer su importancia y adoptar medidas para promover hábitos de sueño saludables no solo beneficia a las personas, sino que también fortalece la competitividad de la empresa”, concluye González.