Los orígenes coahuilenses de Marilyn Monroe y su relación con el ferrocarril mexicano
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Marilyn Monroe, ícono de Hollywood, tiene raíces en Coahuila a través de su madre, quien nació en Piedras Negras, en una familia trabajadora de la época del auge ferroviario en la región
Las historias de los íconos no siempre se remontan a tierras “muy, pero muy lejanas”, como se evidencia en los registros históricos de Coahuila.
Los orígenes de la familia de la mujer más influyente en Norteamérica en los años 50, cuya vida muchos comparan con un cuento de hadas, Marilyn Monroe, se sitúan en una familia que luchaba por salir adelante y aprovechó el primer empuje económico de Piedras Negras, en la frontera de México.
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Marilyn, cuyo nombre verdadero era Norma Jeane Mortenson, nació el 1 de junio de 1926 en Los Ángeles, California, y murió en la misma ciudad el 4 de agosto de 1962.
Su madre, Gladys Pearl Monroe Baker Mortensen Eley, o Gladys Pearl Baker, nació en una familia de ingresos modestos en Piedras Negras, Coahuila, el 27 de mayo de 1902.
Carlos Flores Revuelta, historiador de Piedras Negras, relata que antes de 1900, la madre de Gladys, Della Mae Monroe, conoció a su padre, Otis Elmer Monroe, un aspirante a pintor que provenía de una comunidad en Indianápolis, Estados Unidos.
Esta historia comenzó en medio de las diversas crisis económicas de la época. Otis Elmer Monroe, el padre de Gladys, había abandonado su sueño artístico y, por sugerencia, se unió al auge económico que trajo el Ferrocarril Internacional Mexicano, que lo llevó a trabajar como ferrocarrilero en Piedras Negras.
Esta empresa operaba en la ciudad fronteriza desde 1883, cuando su nombre aún era Porfirio Díaz; así, Gladys en realidad nació en la ciudad con el nombre del dictador.
Aunque la historia de la familia Monroe no es ampliamente conocida, algunos historiadores de la ciudad aseguran que los registros de la madre de Marilyn sí existen, aunque su ubicación exacta es incierta.
Con el tiempo, la historia ha ido perdiéndose, y no se sabe con certeza cuál fue el hogar de los abuelos de Marilyn. Sin embargo, el historiador Carlos Flores Revuelta menciona que probablemente vivieron en la colonia nigropetense “Nueva Americana”, situada al borde del puente Internacional número dos, junto al ferrocarril que conecta ambas naciones.
De acuerdo con los registros de Piedras Negras, esta colonia, con su peculiar estilo de casas americanas, techos a dos aguas y jardines amplios, era el destino tanto de trabajadores temporales como de quienes buscaban empezar una nueva vida en México.
Con los años, la colonia, que abarca solo dos cuadras de la calle Reforma en la frontera, ha ido desapareciendo. Hoy, solo quedan unos pocos inmuebles de aquel estilo, eclipsados por la arquitectura moderna.
La actriz estadounidense, cuyo rostro sigue vigente en el marketing y quien estuvo relacionada con el presidente John F. Kennedy, tiene “una gota” de sangre coahuilense, en el sentido estricto del nacimiento de sus ancestros. Sin embargo, para algunos historiadores, esta conexión no es suficiente para llamarla “mitad mexicana”.
Carlos Flores explica que la relación de Marilyn con Coahuila es un dato curioso de la frontera mexicana; sin embargo, la estancia de su familia fue tan breve que no influyó en su cultura de origen estadounidense.
“El dato es solo anecdótico; como te mencioné, la estancia de los abuelos y madre de Marilyn Monroe fue muy corta. El abuelo era un empleado de bajo nivel en el Ferrocarril Internacional Mexicano”, comenta Flores.
