Cruzar por Emilio Arizpe y Antonio Cárdenas es toda una aventura salvaje, en Saltillo
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Todo un lío representa para las personas tener qué sortear el crucero de Emilio Arizpe de la Maza y Antonio Cárdenas. Entre el intenso tráfico, la necesidad de acudir a sus centros escolares y las malas prácticas de los cumbieros.
No se necesita que sea hora pico, tampoco horario escolar; en cualquier momento vemos que en toco sentidos el tráfico agobia la zona. Entre vendedores ambulantes y el intenso calor es cosa de locos andar por ahí, una más donde se evidencia que el tráfico ya le queda grande a Saltillo.
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Y cuando no hay sol hay agua; en estos días lluviosos se forma un río con no pocos vehículos que quedan varados y se ocasiona el embotellamiento, el cual resulta hasta de muy mala imagen para ser una salida hacia Zacatecas.
Esto porque el drenaje pluvial resulta rebasado por mucho, aunque no es exclusivo de ese tramo; por lo menos desde la colonia Santa Elena bajando hasta el periférico, apenas llueve y resulta anegado el paso tanto para vehículos como para personas.
Volviendo al cruce en cuestión, el problema aumenta en horario escolar. Hay que recordar que en la zona se encuentran la Escuela Forestal, la Facultad de Ciencia de la Comunicación y la primaria Juan Antonio de la Fuente, cuyos estudiantes, si bien es cierto que cuentan con puentes peatonales, no están exentos de peligro en su diario andar.
EL FLUJO DE PERSONAS Y CARROS ES INTENSO
Luego, vienen las dos plazas comerciales ubicadas al norte y al sur, eso aumenta el flujo de autos, ya siendo una zona de mucha actividad, el paso de tráileres y camiones grandes es inevitable. A eso hay que sumarle el tráfico en la salida y entrada de los vehículos militares, pues a unos pocos metros se encuentra el cuartel.
Por si fuera poco, algunas malas prácticas de los choferes de transporte urbano quedan en evidencia.
Los mismos no respetan las áreas marcadas con las líneas amarillas, que en teoría son peatonales, en la práctica resultan inutilizadas por camiones, sobre todo de la ruta Periférico, como se puede constatar en las imágenes que este medio captó.
“Dirán que ahí no debe pasar la raza porque para eso están los puentes, pero para algo se pintaron las rayas y esos no las respetan”, dijo Armando, un trabajador de obra, quien a diario pasa por ahí rumbo a su trabajo en Las Teresitas.
Una de las razones, que no deberían ser excusas para invadir las líneas, es que los semáforos “ni dura nada” en verde, como lo expresaron varios automovilistas, así que, en su opinión, se requiere una mejor sincronización
EN PELIGRO LOS ESTUDIANTES
Al igual que don Armando, cientos de estudiantes de todas las edades deben atravesar eventualmente alguno de los bulevares y realmente se enfrentan al peligro de atropellamiento.
Las altas velocidades desplegadas por los vehículos ocasionan frecuentemente accidentes, situación que debe atenderse con mejor vigilancia por parte del departamento de Tránsito del municipio.
“Sí está tremendo, porque por todos lados hay tráfico y así quieren pisarle con todo”, expresó una madre trabajadora que se dirigía al norte hacia la plaza Sendero a cumplir su jornada laboral.