‘Estamos cansados, pero es nuestra sierra’; las palabras de un brigadista de Saltillo a su esposa

Desde hace casi dos semanas, todos los días Jessenia Martínez observa cómo su esposo se levanta a las 4:00 de la mañana y sale de su casa rumbo a la sierra. Sin señal, no sabe nada de él hasta las 8:00 de la noche, cuando regresa a su hogar.

Con dos años de experiencia, David Bazaldua es uno de los cientos de brigadistas saltillenses que combaten los incendios en la Sierra Zapalinamé y la Sierra de Arteaga.

El matrimonio tiene dos hijas, una niña de cinco años y una bebé de un año. Cuando ven que su papá llega a casa las preguntas son dolorosas, y las respuestas aún más: ¿por qué estás lleno de humo?, ¿por qué hueles así?, ¿por qué tienes los ojos rojos?

David batalla para dormir, le duele la cabeza y ya tiene una quemadura en la mano. Pero nada de eso lo va a detener: “dice que va a seguir echándole muchas ganas”, cuenta Jessenia, quien cada vez que ve partir a su esposo, recurre a las noticias y las redes sociales.

“Nos quedamos preocupados, no sabemos nada de él”, narró la joven, quien brinda apoyo incondicional a su esposo.

Entre pláticas, con los ojos llorosos, David ha desahogado con su esposa la frustración al no poder liquidar el fuego. “Estamos cansados, pero es nuestra sierra”, le dice el brigadista a su esposa.

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En este tiempo, Jessenia tuvo un Día de las Madres sin su esposo, quien ese día trabajó. Pero a ella no le importa, siempre y cuando sepa que David hace lo que le gusta y que está bien con eso.

Y por si fuera poco, además de lidiar todos los días con la preocupación y la frustración, la familia Bazaldua Martínez, todavía tiene que enfrentarse a las quejas, críticas y señalamientos de usuarios en redes sociales.

Por ello, Jessenia envió un contundente mensaje: “pónganse en el lugar de una esposa desesperada y preocupada que día a día ve esto. Son seres humanos que se levantan temprano para luchar”.

“He visto mucha gente que critica y ofende sin saber que ellos también se cansan, no comen bien, no duermen, por hacer algo que a ellos les gusta”, narró la joven a Vanguardia.

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Además, hizo un llamado para quienes visitan la sierra: “quisiera que la gente pusiera algo de su parte, si van a ir a la sierra, no hagan lumbre, no tiren basura. Desde ahí se empieza”, apuntó Jessenia.

Finalmente, por este medio envió un mensaje a su esposo: “que le eche muchas ganas, aquí está su familia. Lo queremos mucho, lo amamos. Sé que es una gran persona. Lo hace porque le gusta y para apoyar, siempre voy a estar con él para apoyarlo en las buenas y en las malas”.

Mañana, quizá esta rutina se repita para David. Salir de casa, combatir el fuego, medio comer, regresar a su hogar, intentar dormir y volver a madrugar...