Saltillo: Tragedia en Los Chorros obliga a actuar; transportistas proponen soluciones inmediatas y de bajo costo
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Tras accidente que dejó cuatro muertos, Canacar plantea medidas urgentes para reducir el riesgo en uno de los tramos más peligrosos de México
Tras el trágico accidente ocurrido este lunes en el tramo de Los Chorros de la carretera 57 —donde un tráiler sin frenos provocó la muerte de al menos 4 personas y dejó más de 11 heridos—, el delegado en Saltillo de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar), Juan Manuel Ramos, presentó un diagnóstico crítico de la zona y planteó medidas inmediatas que podrían prevenir nuevas tragedias.
El representante del sector transportista explicó que las causas de los frecuentes accidentes en este tramo obedecen a cuatro factores clave, los cuales pueden atenderse sin necesidad de grandes inversiones ni obras complejas.
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1. Diseño fuera de norma: Según Ramos, la pendiente entre San Antonio y Los Lirios —último tramo modernizado— duplica la inclinación del segmento antiguo conocido como La Herradura, alcanzando pendientes de hasta 45 grados, muy por encima de lo recomendado para vialidades con tráfico de vehículos pesados de hasta 80 toneladas.
“Esa geometría responde a parámetros pensados para autos ligeros, no para tractocamiones”, enfatizó.
2. Infraestructura deteriorada: El mal estado del pavimento daña suspensiones y sistemas de dirección, aumentando la posibilidad de fallas mecánicas críticas, como la pérdida de frenos.
3. Fatiga del operador: Los retenes en San Roberto y la caseta de Puerto México provocan recorridos de hasta 9 horas en apenas 100 km, lo que obliga a los conductores a seguir manejando sin descanso, ante la falta de paradores seguros.
4. Velocidades incontrolables: En descensos prolongados, un tráiler puede pasar de 60 a más de 120 km/h en solo 500 metros, lo que convierte cualquier falla en una tragedia anunciada.
A pesar de la gravedad, Ramos aseguró que es posible actuar de inmediato, con medidas de bajo costo que aprovechan recursos ya existentes:
>Fotoinfracción y radares: instalación de dispositivos permanentes que midan la velocidad y emitan multas en sitio.
>Integración de historial por placas: uso de plataformas de la SICT para trazar el historial de infracciones y siniestros por empresa y unidad.
>Pantallas VMS: mostrar en tiempo real la matrícula de vehículos que exceden velocidad, alertando a los retenes próximos.
>Guardia Nacional con grúa: establecer una unidad permanente antes de la pendiente para retirar tractocamiones sin frenos.
>Paradores seguros: habilitar zonas de descanso cada 40 km con baños, iluminación y vigilancia.
“Estas acciones pueden financiarse con los recursos que ya generan las casetas de cobro y los fideicomisos de conservación de carreteras. No hay necesidad de crear nuevos impuestos ni megaproyectos”, aseguró.
Además de las medidas urgentes, Canacar propone:
>Un estudio topográfico independiente, elaborado por una universidad acreditada, para evaluar si la pendiente cumple con normas geométricas vigentes (SICT 2018).
>La conformación de una mesa técnica con participación de SICT, Capufe y Guardia Nacional.
>La publicación mensual del “Semáforo de Riesgo Los Chorros”, un reporte abierto sobre velocidad, infracciones y accidentes registrados.
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“La transparencia es la mejor herramienta de corrección”, enfatizó Ramos.
En nombre del gremio transportista, Juan Manuel Ramos expresó su solidaridad con las víctimas del accidente y sus familias, y reiteró el compromiso del sector para colaborar con autoridades de los tres niveles de gobierno.
“Queremos que esta carretera deje de ser conocida como la ‘carretera de la muerte’. Es hora de convertirla en un corredor seguro, competitivo y digno para todos los usuarios”, concluyó.