Se encarece 28% la vivienda en Saltillo en solo tres años; ‘es por la demanda’: experto
El costo de vivienda en Saltillo aumentó en un 28.8 por ciento entre 2021 y 2023, justo los años posteriores a la pandemia por COVID-19, de acuerdo a datos de la Sociedad Hipotecaria Federal.
El porcentaje de la capital coahuilense es mayor en uno por ciento al acumulado en Monterrey y menor en 0.3 por ciento a Torreón.
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La SHF publicó que Saltillo tuvo un incremento del 8.1 por ciento en 2021 respecto al año anterior, 6.8 en 2022 y 13.9 en 2023, tomando en cuenta los primeros trimestres de cada año.
Comparado con las 16 zonas metropolitanas más competitivas de México, Saltillo ocupó la séptima posición entre las que más aumentaron su costo de vivienda.
En primer lugar apareció Tijuana con el 35.7 por ciento seguido de Mexicali con 32.6 y Ciudad Juárez con 31.8.
En los últimos lugares de la tabla se encontraron Ciudad de México (contabilizada como estado) con 19.2 por ciento -siendo la única que tuvo una diferencia negativa de un año a otro cuando sumó -0.4 por ciento en el costo en el primer trimestre de 2021.
A la capital del país le siguen Toluca con el 19.7 por ciento y León con el 23 por ciento, siendo los tres menores porcentajes de todo el país.
ES UN TEMA DE OFERTA
De acuerdo con el economista y docente de la UAdeC, Antonio Serrano, el aumento es el esperado e incluso detalló que podría considerarse corto.
Detalló que en el sector inmobiliario para el que trabaja, el aumento de los precios ya llegó al 40 por ciento sólo en lo que va de este 2023.
Lo anterior, explicó el especialista, se debe principalmente a la poca oferta que hay de vivienda derivada en parte a que durante la pandemia dejó de construirse nueva.
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“Lo que ha subido el 30 por ciento, es la vivienda más económica, la vivienda media y la vivienda media alta, subieron ya en lo que va del año un 50 por ciento”, detalló Serrano.
Explicó que una de las causas es el excesivo crecimiento económico, “que estamos teniendo como país” en donde la economía crece, la gente tiene un poquito más de dinero, pero no hay casas.
“La construcción de vivienda crece a un ritmo menor al 2 por ciento anual, mientras que los salarios, los más bajos, subieron un 6 por ciento por decreto presidencial”, explicó Serrano
Agregó que en ciudades como Querétaro, Saltillo y Chihuahua, la economía crece al 4 por ciento, los salarios crecen hasta el 8 por ciento pero la industria inmobiliaria crece solo el dos por ciento.
“Además, durante la pandemia las casas no se vendieron y dejaron de construirse, entonces no hubo casas. Terminada la pandemia, la gente sigue teniendo hijos. Este es un claro ejemplo de cuando el mercado se mueve de manera libre conforme a lo que dictan las leyes de la economía”, declaró.
Serrano también mencionó que aunque los salarios han crecido “nominalmente” a muchas personas no les alcanza para comprar una vivienda “porque las empresas constructoras no quieren construir casas para pobres, para los que ganan poquito.
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“Ese no es un mercado atractivo, entonces las constructoras no edifican en ese sector, quedan pocas casas y todavía suben más en las casas de la clase media”, dijo.
Serrano también descartó que el aumento en los precios de los materiales de construcción como la varilla o el cemento sean factores determinantes en el aumento de la vivienda.
Consideró que el terreno, la ubicación y los impuestos son otros factores más importantes para determinar el costo de la vivienda.