Se manifiestan padres de familia de escuela de Saltillo atacada por pirómano
A la queja de padres de familia de la escuela primaria incendiada se sumó una denuncia de otra institución educativa también afectada con robos en el mismo sector
Padres de familia de la escuela primaria “Doctor Belisario Domínguez”, ubicada al norponiente de Saltillo, impidieron este martes el ingreso de sus hijos a clases en exigencia a autoridades escolares, así como de los gobiernos estatal y municipal, solución al problema que mantienen desde hace años con una persona con discapacidad psicosocial por adicciones que daña la escuela.
VANGUARDIA publicó este fin de semana la problemática que vive la comunidad de este plantel que ha sido incendiada en por lo menos tres ocasiones. El inmueble también ha sufrido daños en tuberías y mobiliario que ascienden a por lo menos 10 mil pesos.
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Hasta ahora las autoridades estatales y municipales de seguridad han acordado mantener vigilada la escuela durante todo el día, hasta que la persona que es señalada de agresora sea detenida.
Miguel Navejas Martínez, representantes de la dirección de primarias de la Secretaría de Educación estatal, dijo que solicitarán el apoyo de la Secretaría de Salud para trasladar a la persona señalada de responsable de daños a la primaria al municipio de Parras, donde hay un Centro de Salud Mental estatal.
El temor de los padres de familia es que los daños escalen de lo material a lo personal con alumnos, maestros o personal administrativo de la escuela, pues el último ingreso de “El Gufy”, como apodan a la persona a la que responsabilizan de los daños, ocurrió el jueves en horario escolar, y nadie se percató de ello, hasta que incendió los sanitarios.
A la protesta acudieron agentes de la Comisaría de Seguridad Pública Municipal y de la Secretaría de Seguridad Pública, así como personal de la dirección de Primarias de la Secretaría de Educación Pública del Estado.
Todos se dijeron impedidos de actuar, pues por ser una persona con discapacidad psicosocial y carecer de la responsabilidad de los padres, no podían ingresarlo a un anexo o al Centro de Salud Mental (CESAME).
Jordan Espino, comandante de la zona norte de la Comisaría de Seguridad Municipal, explicó que tiene dos años dando seguimiento a las conductas de “El Gufy”, y que ha sido detenido en diversas ocasiones sin que por reincidencia el Agente del Ministerio Público, de la Fiscalía General del Estado haya realizado alguna acción mayor.
“Acabo de hablar con la familia y ellos dicen que no les interesa, que si lo detenemos y nos lo llevamos para ellos mejor, pero no van a internarlo”, dijo el agente municipal.
De acuerdo con la directora del plantel educativo, Patricia Bravo, desde el 12 de septiembre del año pasado presentó una denuncia ante las autoridades ministeriales, acompañada del departamento jurídico de la Secretaría de Educación, sin que esto haya servido para que la persona con discapacidad psicosocial sea procesada.
Jordan Espino, de la Comisaría de Seguridad Pública Municipal, aseguró que la última detención hecha a esta persona ocurrió el 22 de abril pasado.
Mientras la protesta se desarrolla y los padres de familia esperan resultados de las autoridades, algunos niños toman clases en el exterior del plantel.
Hasta ahora las autoridades estatales y municipales de seguridad han acordado mantener vigilada la escuela durante todo el día, hasta que la persona que es señalada de agresora sea detenida.
Miguel Navejas Martínez, representantes de la dirección de primarias de la Secretaría de Educación estatal, dijo que solicitarán el apoyo de la Secretaría de Salud para trasladar a la persona señalada de responsable de daños a la primaria al municipio de Parras, donde hay un Centro de Salud Mental estatal.
SECUNDARIA CON REPORTE DE DAÑOS
Eusebio Carrizales, comandante de la Comisaría de Seguridad Pública Municipal, dijo que casi no había reportes de robos en el sector norponiente de la ciudad.
Padres de familia de la escuela secundaria técnica número 37, “Arturo Ruiz Higuera”, ubicada a una cuadra de la primaria “Belisario Domínguez”, también se manifestaron este martes en exigencia a solucionar la problemática de daños al plantel.
Desde hace tres meses, el cableado eléctrico de la institución fue robado, es el mismo tiempo que los alumnos toman clases en el exterior de la secundaria. Reparar este daño cuesta aproximadamente 70 mil pesos.
Padres de familia y directivos de esta institución también señalan al “Gufy” como la persona probablemente responsable de los daños a la secundaria.