"Aspire", la academia de los sueños deportivos en Qatar
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Expertos deportivos de unos 60 países forman a los jóvenes talentos para el futuro. El objetivo lejano son las medallas olímpicas.
Doha, Qatar.- En Qatar todos saben lo que es "Aspire", pero también más allá de sus fronteras, el supermoderno centro deportivo y de entrenamiento goza de un excelente renombre.
Expertos deportivos de unos 60 países forman a los jóvenes talentos para el futuro. El objetivo lejano son las medallas olímpicas.
Un sprint, un disparo, un gol. Hassan alza el puño en alto y sale volando de nuevo hacia atrás. El muchacho sólo tiene nueve años, pero dribla ya como como un as. El chico sabe también luchar y quizás en diez años luzca la camiseta de la selección de fútbol de Qatar.
"Sí, todos queremos jugar por nuestro país", dice Hassan y señala a sus amigos con los jerseys azul celeste. El entrenador agita ya la mano impaciente, la corta pausa ha terminado. Aquí en la "Academia Aspire" de Doha se aprende y entrena rigurosamente según el plan trazado.
Casi todos los chicos viven con sus padres, pese a que la academia brinda un internado de cinco estrellas con 120 habitaciones y ocho suites para unos 250 jóvenes deportistas.
Expertos y ayudantes de unos 60 países -entrenadores, científicos deportivos, fisioterapeutas, médicos- se ocupan prácticamente las 24 horas del día de las jóvenes promesas. En 20 aulas se estudia antes del entrenamiento: inglés, física, biologia.
Todo empezó en 2004 con una clase para 31 jóvenes futbolistas. Actualmente, más de 200 talentos entrenan en la elite clase en óptimas condiciones.
Con el fútbol empiezan los chicos a los seis años, para las otras doce modalidades olímpicas se cuenta con una programa de seis años. Los muchachos de edades comprendidas entre los 12 y 18 años van a la escuela también en la Academia y practican con experimentados entrenadores. Todos vibran de entusiasmo, pues todos sueñan con ser un día campeones olímpicos. ¿Por qué no? Al fin y al cabo, "Aspire" significa "aspirar a algo".
"El deporte debe ser para los qataríes un medio para variar su imagen. El objetivo es llegar a ser el número uno. Es increíble la velocidad con que se desarrolla este país", dice el bioquímoco alemán Sven Christian Voss.
El pequeño estado en el Golfo Pérsico tiene 1,7 millones de habitantes, pero según recientes censos sólo 243.000 son qataríes. Allí cada talento es oro y el país pueden permitirse el lujo: el petróleo y el gas han convertido a Qatar en uno de los países más ricos del mundo.
La familia del emir es entusiasta del deporte y no se fracasará por falta de dinero. Sólo el gigantesco complejo "Aspire" y la adjunta clínica deportiva costó una suma de tres dígitos en millones de dólares estadounidenses.
Una inversion para el futuro. Unos 6.000 talentos deportivos qataríes pasaron ya por la criba del "programa escolar olímpico", pero sólo los mejores se quedan. Todos los taxistas de Doha saben donde está "Aspire". Una torre de más de 100 metros de altura indica el camino hacia la Meca del deporte.
"Aspire" abarca un área de 290.000 metros cuadrados y los jóvenes futbolistas disponen nada menos que de ocho campos de acuerdo a las normas de la FIFA. En el centro se alza el estadio Califa, uno de los doce escenarios de juego del Mundial de fútbol 2022.
Muy apreciado son sus campos de entrenamiento. "Aspire" ha abierto sus puertas a deportistas de todo el mundo. El Bayern Múnich estuvo ya aquí, así como el Real Madrid. Y, naturalmente, gran número de estrellas: Pelé, Ronaldinho, Lionel Messi. También el doble campeón olímpico de 1.500 metros, el marroquí Hicham El-Guerrouj, forma parte de los embajadores de "Aspire" y es ejemplo e ídolo para la futura generación de deportistas de Qatar.