Super Bowl XXXII: Cuando John Elway venció a todos sus demonios... y a los poderosos Packers

Tras cuatro derrotas en el juego grande, los Denver Broncos finalmente lograron levantar el primer trofeo Vince Lombardi de su historia, poniendo fin a una racha negativa que había perseguido a la franquicia durante décadas.

La victoria de Denver también significó el fin de una sequía para la Conferencia Americana (AFC), que acumulaba 13 derrotas consecutivas en el Super Bowl. Sin embargo, el camino al campeonato no fue sencillo para los Broncos.

A pesar de cerrar la temporada regular con marca de 12-4, Denver no obtuvo el título de la AFC Oeste, ya que los Kansas City Chiefs finalizaron con un récord de 13-3. Como resultado, los Broncos tuvieron que disputar la Ronda de Comodines, convirtiéndose en apenas el segundo equipo en la historia de la NFL en ganar el campeonato tras calificar como equipo comodín. Denver tuvo que ganar de visitante a Kansas City y a Pittsburgh para llegar al Super Bowl, celebrado en el Qualcomm Stadium, de San Diego.

Antes de esta gran victoria, los Broncos habían sufrido duras derrotas en el Super Bowl contra los Dallas Cowboys (XII), New York Giants (XXI), Washington Redskins (XXII) y San Francisco 49ers (XXIV).

En esta ocasión, se enfrentaban a los Green Bay Packers, campeones defensores liderados por el mariscal de campo Brett Favre, quien había lanzado 35 pases de anotación durante la temporada regular.

Por su parte, los Broncos contaban con la mejor ofensiva de la NFL, encabezada por el veterano mariscal de campo John Elway y el explosivo corredor Terrell Davis, quien jugaría un papel fundamental en la victoria del equipo.

Uno de los momentos más icónicos del partido llegó en el tercer cuarto, con el marcador empatado 17-17. Denver se encontraba en tercera oportunidad en la zona roja cuando Elway llamó una jugada de pase para intentar conseguir el primero y gol.

Al no encontrar receptores desmarcados, el veterano mariscal decidió correr con el balón y se encontró con dos defensivos en la yarda cinco. En lugar de deslizarse para evitar el golpe, Elway optó por lanzarse en busca de la conversión. En el aire, recibió el impacto de los defensores y giró espectacularmente, logrando unas yardas adicionales y consiguiendo el ansiado primero y gol.

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Esta jugada, que quedó inmortalizada como “El helicóptero”, es considerada una de las más memorables en la historia del Super Bowl y un reflejo de la determinación de Elway por conseguir la victoria.

Tras la heroica acción del mariscal, Terrell Davis anotó el segundo de sus tres touchdowns en el partido, consolidándose como la pieza clave del triunfo de los Broncos. Su desempeño sobresaliente le valió ser nombrado el Jugador Más Valioso del Super Bowl XXXII.

Con esta victoria, los Denver Broncos no solo rompieron su propia maldición, sino que también le devolvieron la gloria a la AFC y marcaron el inicio de una nueva era de éxitos para la franquicia.

DESARROLLO DEL SUPER BOWL XXXII

Primer cuarto. El encuentro comenzó con intensidad, con los Broncos estableciendo el ritmo del partido. Terrell Davis anotó el primer touchdown del juego con un acarreo corto, dándole a Denver la ventaja. Sin embargo, los Packers respondieron rápidamente con un pase de anotación de Brett Favre a Antonio Freeman, empatando el marcador 7-7.

Segundo cuarto. Denver retomó el control del partido con otra anotación terrestre de Davis. A pesar de sufrir migrañas que lo mantuvieron fuera por un breve periodo, Davis regresó para ser una pieza clave en la ofensiva de los Broncos. Green Bay igualó el marcador con un gol de campo de Ryan Longwell, pero antes del descanso, Howard Griffith anotó otro touchdown para los Broncos, dándoles una ventaja de 17-14 al medio tiempo.

Tercer cuarto. En la segunda mitad, los Packers volvieron a empatar el partido gracias a una anotación de Dorsey Levens. Sin embargo, uno de los momentos decisivos llegó en este cuarto cuando John Elway realizó su icónica jugada del “helicóptero”, lanzándose para conseguir un crucial primero y gol que cambió el rumbo del encuentro. Esta acción reflejó la determinación del mariscal de campo y mantuvo a los Broncos en posición de anotar.

Último cuarto. Con el marcador empatado 24-24, Denver tomó la delantera con un tercer touchdown de Terrell Davis, quien se convirtió en la gran figura del partido. A pesar de los esfuerzos de Favre por montar una serie ofensiva en los últimos minutos, la defensiva de Denver se mantuvo firme y selló la victoria con una detención clave en cuarta oportunidad.

PARA DESTACAR: EL HISTÓRICO HELICÓPTERO

La famosa jugada que engalana este artículo, bautizada como “El helicóptero” duró segundos, pero fue la consolidación de una carrera de película de John Elway, el QB que había caído en tres ocasiones en el juego grande y que parecía predestinado a ganarlo algún día. Ese día llegó.

Pero la película habría de tener drama y sacrificio. El hombre se rifó el físico, como todo líder. Con dicha acción logró lo más importante: la confianza de que sí era posible derrotar a sus demonios y de paso a unos Packers que no daban tregua. Así lo vivieron sus compañeros, los aficionados y así se escribió el guión de esa película.