Hasta 70% de ejecutivos de empresas invertirá este año impulsado por el nearshoring

El apetito de las cadenas de suministro globales para relocalizar parte o la totalidad de sus operaciones en México será la principal razón para que hasta 70% de los altos directivos del país realicen inversiones este año, revela la encuesta Perspectivas de Alta Dirección en México 2024, elaborada por KPMG.

“Las oportunidades que representa el nearshoring demuestran que, aunque los cambios que se están suscitando en el ambiente de negocios son relevantes, la Alta Dirección se propone capitalizar el momento no solo para evaluar la estructura del negocio, hacer ajustes en su funcionamiento y aprovechar esta tendencia con visión a largo plazo, sino también para salir y atraer inversiones”, sostuvo Ricardo Delfín, socio líder de KPMG Board Leadership Center en México.

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En entrevista, detalló que los sectores más activos de cara a la relocalización de empresas serán los de manufactura, servicios financieros y el real estate.

Destacó que 465 de los más de 900 altos directivos que participaron en la encuesta planean hacer inversiones para ampliar sus operaciones en estados como Nuevo León, con 41% de las respuestas, Ciudad de México con 33%, y Jalisco con 31%, por sus ubicaciones estratégicas.

La encuesta muestra que del 40% de las organizaciones que buscarán financiamiento externo para crecer, un 72% contratará créditos en la banca tradicional, 22% vía aportación de socios y 18% acudirá a la banca de desarrollo.

“Nos sorprende que son pocas las empresas que señalaron que les interesa financiarse a través de emisiones en Bolsa”, lamentó.

Ello, a pesar de que este año se deberá poner en marcha la nueva Ley del Mercado de Valores, que permitirá emisiones simplificadas para que empresas pequeñas y medianas puedan emitir capital y deuda.

Ricardo Delfín advierte que para que las empresas mexicanas realmente sean partícipes de los beneficios del nearshoring será necesario que mejoren su gobierno corporativo, pero sobre todo que atiendan temas ambientales, sociales y de gobierno corporativo (ASG), que ya son exigencia creciente en economías más desarrolladas, de donde provendrá gran parte del capital que se inyectará en el país.