Cigarros electrónicos y el futuro del ‘vape’ en México ante la ley

Aclarando que no se pronuncian a favor, la prohibición absoluta de cigarrillos electrónicos y vapeadores “vulnera la libertad de comercio”, aseguró la Suprema Corte de Justicia Nacional el pasado martes, 19 de octubre.

Se trata del artículo 16 de la Ley General para el Control de Tabaco, que señala y “prohíbe comerciar, vender, distribuir, exhibir, promocionar o producir cualquier objeto que no sea un producto del tabaco, pero que contenga algún elemento que lo identifique con productos del tabaco”.

Expertos coinciden con la Suprema Corte; Philip Morris, dueño de la empresa Marlboro, comentó a Forbes México que la prohibición absoluta “abre la puerta y aumenta el incentivo para un mercado ilegal que elimina controles de calidad, aumenta el riesgo para el consumidor, facilita el acceso para menores de edad y hace que los usuarios que ya consumían opciones menos dañinas, regresen al cigarro convencional”.

Actualmente, consumidores pueden adquirir estos cigarros y vapeadores en línea, plazas comerciales o con distribuidores personales. Tres días después a las declaraciones de la SCNJ, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador insistió en su total prohibición, pues sigue siendo motivo de adicción a la nicotina.

Sin embargo, médicos especializados señalan que la prohibición no resuelve la problemática, e insisten en la regulación del producto.

Al menos 900 mil jóvenes en México han tenido acceso a vapeadores o han probado cigarros electrónicos. Según Forbes, estiman que muchachos de entre 13 y 15 años de edad, al menos un 5 por ciento, iniciaron en el mundo de la nicotina después de probar estos aparatos.

Ante ello, queda un camino de dudas, estudios y cuestiones para confirmar si es el equivalente a un cigarrillo como tal o si logrará su regulación, empero, AMLO afirmó que su prohibición absoluta es la postura oficial de su gobierno.