Elecciones presidenciales: no hay un candidato ‘natural’, advierte Federico Berrueto

Dentro de los prospectos que aspiran a la Presidencia de la República no existe una opción “natural”, advierte el columnista Federico Berrueto. Esto ocurre, señala, en una circunstancia de desprestigio y debilidad de los partidos políticos. A diferencia de las dos últimas elecciones presidenciales, en las que hubo una clara preferencia anticipada de quien las ganó. Enrique Peña Nieto en 2012 y Andrés Manuel López Obrador en 2018.

Bajo este panorama, en su columna publicada hoy en VANGUARDIA, Berrueto analiza las condiciones de los “destapados” que aspiran a la Presidencia mediante el próximo proceso electoral. Para iniciar advierte que “la ausencia de aspirantes por la oposición parte de la idea de rezago por la campaña anticipada de los prospectos de Morena”.

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De acuerdo con el columnista, fue tras la “derrota” en la Ciudad de México, en los comicios intermedios, que el Presidente decidió nombrar a los prospectos que podrían sucederle: “Adán Augusto López, nombrado secretario de Gobernación a finales de agosto del año de la elección intermedia; Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno de la Ciudad de México; Marcelo Ebrard, secretario de Gobernación; y Ricardo Monreal, líder de la mayoría en el Senado de la República”.

Deduce que “Sheinbaum, a quien el cargo de jefa de Gobierno le ofrece mayor visibilidad, aunque también le ha afectado por las dificultades propias de la función. Ebrard también cuenta con amplio conocimiento, pero también le afecta la herencia de su gobierno en la ciudad, especialmente los problemas en la Línea 12 del Metro, obra insignia de su gestión. Adán Augusto es quien más ha crecido en las encuestas y a quien no pocos le aprecian como el caballo negro. Monreal se ha abierto camino a esfuerzo propio y es notorio que no cuenta con la simpatía del presidente López Obrador”.

Por parte de la oposición, Berrueto destaca a Gustavo de Hoyos y Ángel Gurría. “De Hoyos, quien recientemente anunció que buscaría la candidatura a partir de una propuesta ciudadana y de planteamientos disruptivos con el ánimo de ganar atención, pero que han comprometido su credibilidad y la seriedad de su opción. Su talante prudente e inteligente no van con los modos y el contenido de su propuesta inicial”. Mientras que sobre Ángel Gurría, exsecretario de Relaciones Exteriores y de Hacienda en la gestión de Ernesto Zedillo, señala que “es el mexicano con mayor reconocimiento y prestigio en el exterior y es un hábil e inteligente polemista, además de un eficaz funcionario en todas las tareas que ha desempeñado”.

Por último, con estas consideraciones, aconseja a la oposición “transitar hacia un mecanismo de selección que permita la ‘construcción’ de una candidatura, esto es, una elección primaria organizada no por los dirigentes de los partidos, sino por un grupo selectivo de ciudadanos reconocidos por su capacidad, reputación y experiencia”.