Esposa de George Clooney ayudó a convencer a los fiscales de la CPI de emitir orden de arresto contra Netanyahu y los líderes de Hamás

Amal Clooney, esposa del actor y director George Clooney, ha jugado un papel fundamental en la presentación de argumentos para que la Corte Penal Internacional (CPI) procesara al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ya los líderes de Hamás por presuntos crímenes de guerra. en Israel y Gaza.

Clooney ha anunciado en el sitio web de la Fundación Clooney para la Justicia que el CPI le pidió que se uniera a un panel de expertos legales internacionales para evaluar las pruebas de presuntos crímenes de guerra.

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Después de una extensa revisión legal, el panel consideró unánimemente que el CPI tiene competencia sobre los crímenes cometidos en el curso de la guerra de Israel contra Hamás, recomendando que tanto Hamás como los líderes israelíes rindan cuentas.

“Concluimos unánimemente que hay motivos razonables para creer que los líderes de Hamas, Yahya Sinwar, Mohammed Deif e Ismail Haniyeh, han cometido crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad, incluyendo toma de rehenes, asesinato y crímenes de violencia sexual”, escribió Clooney. sobre la determinación del panel.

El liderazgo israelí no escapó a las recomendaciones del panel, que señaló tanto al Primer Ministro Benjamín Netanyahu como al Ministro de Defensa israelí de línea dura, Yoav Gallant, por crímenes contra la humanidad, incluido “el hambre como método de guerra, el asesinato, la persecución y el exterminio”.

Clooney, de 46 años, una consumada abogada libanesa británica de derechos humanos, cofundó la Fundación Clooney para la Justicia con su esposo, el ganador del Premio de la Academia George Clooney.

Junto a Clooney en el panel se encontró una variedad de expertos legales internacionales y asesores académicos en derecho internacional, incluido el derecho internacional humanitario y el derecho penal internacional. Dos miembros eran ex jueces de tribunales penales de La Haya.

Clooney fue una firme defensora del procesamiento de los crímenes de guerra cometidos en Ucrania, e incluso se dirigió a un panel de la ONU en abril de 2022 cuando llamó al país devastado por la guerra “un matadero”.

Sin embargo, hasta ahora ha resistido críticas dispersas en línea por su aparente reticencia a hablar sobre la guerra entre Israel y Hamas.

“Como abogado de derechos humanos, nunca aceptaré que la vida de un niño tenga menos valor que la de otro. No acepto que ningún conflicto esté fuera del alcance de la ley, ni que ningún perpetrador esté por encima de la ley”, escribió.

“Por eso apoyo el paso histórico que ha dado el Fiscal de la Corte Penal Internacional para hacer justicia a las víctimas de atrocidades en Israel y Palestina”.