Exigen búsqueda de 13 migrantes desaparecidos en desierto de Chihuahua

CIUDAD JUÁREZ, CHIH.- “Si yo hubiera sabido todo el riesgo que se corría, si me hubiera dado cuenta de todo esto antes, hubiera rogado más porque mi esposo no se fuera”, dijo Karla, quien es esposa de uno de los 13 migrantes que desaparecieron en el desierto de Coyame en Chihuahua, en su lucha por llegar a Estados Unidos.

La mujer, quien omitió su nombre real por miedo a sufrir alguna amenaza, contó a El Universal que desde que su esposo desapareció el 25 de septiembre de 2021 junto con otros 12 migrantes más, su vida cambió al igual que la de sus tres hijas.

“Crece la angustia, la desesperación, los problemas aumentan desde el primer mes como familia, en lo económico, en todo. La esperanza es oro, pero entre más pasa el tiempo, más perdemos las esperanzas de encontrarlos con vida”, añadió.

Junto con sus tres hijas de 16, 15 y siete años, vive con la angustia de saber dónde está su esposo, ya que pese a las múltiples búsquedas no se sabe nada aún.

“No sabemos si está bien, si está mal. Si está vivo o muerto. Hemos sufrido mucho emocionalmente, económicamente, yo soy ahorita padre y madre, todo el día ellas están solas el fin de semana porque tengo que buscar a su papá de alguna forma”, contó.

Comentó que su lucha por buscar a su esposo la ha dejado sola, sin familia y sin amistades, ya que una situación así cambia la vida.

Asegura que, pese a que las autoridades de los tres niveles de gobierno saben de la desaparición de los 13 migrantes en Coyame del Sotol, no hay avances en las investigaciones ni en las búsquedas. Pide que la justicia sea igual para todos y no en un solo caso, como el de los sacerdotes jesuitas en Cerocahui, Urique, en donde sus restos fueron localizados en menos de 72 horas.

EL TRAYECTO

La mujer asegura que la desaparición de su esposo y otras 12 personas más no tiene que ver con que ellos se perdieron en el desierto de Chihuahua en su lucha por llegar a Estados Unidos, sino que fueron privados de la libertad por el crimen organizado que opera en esa zona.

Los 13 migrantes cruzarían por el desierto de Coyame para llegar a Estados Unidos, específicamente a Arlington, Texas.

Desde ese punto, cada migrante tomaría su camino a diferentes destinos.

Sus identidades son las siguientes: Luis Carlos Islas Villegas; Beningno Alberto Álvarez Castro; Alan Ricardo Salas Torres; Elías Girón Mateo; Daniel Villa Rascón; Emanuel Aguilar Baylon; Rodolfo Guzmán González; Javier Ricardo López Rodríguez; Amador Aguilar; José Luis Pallares, y Lorenzo Abraham González Mendoza. Las otras dos personas faltantes no fueron identificadas hasta el momento.