Inflación y altas tasas de interés impulsan compra de vivienda usada
En México no hay vivienda nueva accesible y eso provoca que las personas opten por inmuebles usados
La baja producción de vivienda nueva en el País, la inflación y las altas tasas de interés impulsarán la compra de vivienda usada este año, advirtió la consultora Realty World.
Jorge Paredes, director de la compañía, comentó que en México no hay vivienda nueva accesible y eso provoca que las personas opten por inmuebles usados.
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”Ponderando la tendencia de 2022 y 2023, prevemos que el crecimiento de colocación de vivienda usada en el País sea de entre 4 y 5 por ciento”, estimó.
De enero a noviembre de 2022, último dato disponible, se vendieron 185 mil 588 casas usadas, mientras que en el mismo periodo, pero del año pasado, el Registro Único de Vivienda arroja que se colocaron 119 mil 86 casas nuevas, señalan los datos de Realty World.
Incluso, el año pasado se vendieron 5 mil 62 viviendas nuevas menos que en el mismo periodo del 2022 y 45 mil 864 menos que en 2019, previo a la pandemia por el COVID-19.
El especialista indicó que las tasas de interés impactaron el costo de financiamiento para adquirir vivienda y eso generó un incremento de los precios de las casas en general.
”Esos son factores que hacen que las personas busquen una alternativa a la vivienda nueva, la cual resulta más cara y más escasa en algunas entidades”.
”Los mexicanos la piensan más para comprar un inmueble nuevo porque los pagos mensuales son más altos con las tasas de interés”, refirió.
Paredes criticó que pese a que la tasa de inflación ha venido reduciéndose, el Banco de México (Banxico) no ha reducido las tasas de interés de referencia.
Actualmente, la tasa de referencia de Banxico se ubica en 11.25 por ciento.
El sistema bancario, aseguró, ha tratado de no impactar fuertemente la subida de las tasas de interés, que se dio a raíz de 2022.
”El Banxico debería empezar a hacer un ajuste a la baja de la tasa de interés de referencia, porque la inflación, si bien es cierto que se ubicó en 2022 al máximo de 8.70 por ciento y justificaba el incremento, ahora ya no es así”, señaló.
En contraste, dijo, el índice de precios ha estado a la baja, pues en septiembre del 2023 fue 4.45 y octubre 4.26 y noviembre 4.32 por ciento, por lo que ya no hay una justificación para que esté tan alta la tasa de referencia del Banco de México.
Paredes indicó que bajar las tasas permitiría reducir el costo de financiamiento y haría más accesible las casas nuevas.
Reiteró que la falta de oferta de las casas nuevas y su alto precio motiva a los usuarios a adquirir inmuebles usados a precios más económicos.
Marisol Becerra, directora de Consultoría de Tinsa México, comentó que de enero a septiembre del año pasado se colocaron a través del Infonavit, Fovissste y la banca 311 mil viviendas, al menos 45 por ciento correspondió a vivienda usada.
“Hace unos años (dicho porcentaje) equivalía a 31 por viento y hoy es 45 por ciento. Está alcanzando el mismo porcentaje que la vivienda nueva.
“Su crecimiento ha sido paulatino de 2015 a 2023, pero cada vez más va teniendo mayor participación”, expuso.
Añadió que este fenómeno empieza a incentivar el alza del precio de las viviendas usadas, dependiendo de la oferta y la demanda en cada entidad.
De acuerdo con datos de la Asociación Hipotecaria Federal, el incremento en el precio de la vivienda usada al tercer trimestre de 2023 a nivel nacional, por ejemplo, fue de 10.3 por ciento, expresó.