Escuelas de Seattle presentan una demanda contra la Big Tech, las culpa de la crisis de salud mental en los jóvenes

La demanda fue interpuesta el viernes pasado en una corte federal. La denuncia que consta de 91 páginas afirma que las empresas de redes sociales provocaron una molestia pública al enfocar sus productos en los niños.

En este sentido, culpa a las redes sociales por deterioro en la salud mental y trastornos de comportamiento, incluyendo ansiedad, depresión, trastornos alimenticios y acoso cibernético; con lo que se complica las labores de educar a los estudiantes; y a su vez han obligando a las escuelas a tomar medidas tales como contratar a más profesionales en salud mental, desarrollar planes de estudio sobre los efectos de las redes sociales y proveer capacitación adicional al personal docente.

“Los acusados han explotado con éxito los cerebros vulnerables de la juventud, enganchando a decenas de millones de estudiantes en todo el país en ciclos de retroalimentación positiva por el uso excesivo y abuso de las plataformas de redes sociales de los acusados”, precisa la demanda. “Peor aún, el contenido de los acusados creado y dirigido a la juventud a menudo resulta dañino y explotador”.

Por su parte, ni Meta, Google, Snap y TikTok respondieron de inmediato a solicitudes de comentarios.

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Aunque la ley federal, sección 230 de la Ley de Decencia en las Comunicaciones, ayuda a proteger a las compañías de internet de la responsabilidad como resultado de lo que terceros publican en sus plataformas, la demanda arguye que la medida no protege el comportamiento de las empresas en este caso.

“La parte demandante no arguye que los acusados son responsables de lo que terceros han dicho en las plataformas de los acusados, sino la propia conducta de los acusados”, señala la demanda. “Los acusados recomiendan de forma afirmativa y promueven contenido dañino a los jóvenes, como el contenido a favor de la anorexia y los trastornos alimenticios”.

Así también, la demanda asevera que entre 2009 y 2019, hubo en promedio un aumento del 30% en el número de alumnos del distrito de escuelas públicas de Seattle que indicaron haberse sentido “tan tristes o desesperanzados casi todos los días durante al menos dos semanas en fila” a tal grado que dejaron de hacer sus actividades habituales.

Debido a esta situación, el distrito escolar está solicitando que la corte ordene a las compañías dejar de crear molestias públicas, así como otorgar compensación, y pagar por educación preventiva y tratamiento por uso excesivo y problemático de redes sociales.

No obstante cientos de familias ya han presentado demandas en contra de las empresas debido a los daños que han sufrido sus hijos a causa de las redes sociales, hasta a hora se desconoce si otros distritos escolares han interpuesto denuncias similares a la de Seattle.

Con información de la Agencia Associated Press.