¿Quién es Abu Mohammad al-Jolani, el líder rebelde sirio, que niega vínculos con Al Qaeda?

Después de años de adoptar los títulos de hermano, jeque y líder de las zonas liberadas, Abu Mohammad al-Jolani adoptó su verdadero nombre “Comandante Ahmed al-Sharaa” tras la operación “Disuasión de la Agresión” lanzada por su facción Hayat Tahrir al-Sham (HTS) junto con facciones de la oposición contra las fuerzas del régimen.

Esta batalla, que llevó a las facciones a Damasco y condujo a la huida de Bashar al-Assad, trajo consigo nuevos cambios en el nombre y la personalidad de Ahmed al-Sharaa, quien fue descrito por el periódico alemán Bild como “el hombre que hace temblar a al-Assad”.

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Al-Jolani es conocido desde hace tiempo por los cambios que lo convirtieron en un caso único en el mundo de la yihad del que se originó, transformándose con el paso de los años de ser invisible a la vista del público, de usar turbante a prescindir de él, de vestimenta militar a ropa civil y de un discurso de línea dura a la moderación.

El hombre que comenzó su viaje en el mundo de las “organizaciones islamistas y la yihad” ahora ha llegado a Damasco sobre las ruinas de los restos de Bashar al- Assad, para tomar la inciativa, dando un discurso de victoria desde el interior de la Mezquita Omeya de la capital el 8 de diciembre.

El líder disidente de Tahrir al-Sham, Jihad Issa al-Sheikh (Abu Ahmad Zakour), habló previamente con Enab Baladi sobre la singularidad de al-Jolani al establecer las estrategias del HTS y cambiar su discurso y comunicaciones con partes externas, describiendo a al-Jolani como “el único líder”.

¿Quién es Ahmed al-Sharaa?

Ahmed Hussein al-Sharaa ( Abu Mohammad al-Jolani ) es oriundo de los Altos del Golán, en el oeste de Siria, pero nació en Riad, Arabia Saudita, en 1982 y regresó a Siria a principios de 1989.

Creció y vivió en el barrio Mezzeh de Damasco, en la zona de las Villas Orientales, donde sus inclinaciones islámicas eran casi inexistentes. Fue influenciado por la intifada palestina de 1999 y 2000, y alguien le aconsejó que fuera a la mezquita a rezar allí y que se adhiriera a la oración en la mezquita, según declaró al-Jolani en una entrevista.

Los comienzos de Al Qaeda

Fue a Irak después de la invasión estadounidense en 2003 y ascendió en las filas de Al Qaeda en Irak, y se dice que se convirtió en un colaborador cercano de su líder Abu Musab al-Zarqawi.

Fue arrestado por el ejército estadounidense y retenido en Camp Bucca, y después de su liberación en 2008, colaboró con Abu Bakr al-Baghdadi, el entonces líder del Estado Islámico de Irak (antes de su muerte), y fue nombrado jefe del aparato de inteligencia paquistaní en la provincia de Nínive.

Al-Jolani regresó a Siria en 2011 y fundó el Frente Al-Nusra como un grupo subsidiario del Estado Islámico.

En 2013, rechazó las instrucciones de al-Baghdadi de disolver al-Nusra como grupo independiente y fusionarlo con el Estado Islámico, prometiendo lealtad a al-Qaeda y a su líder en ese momento, Ayman al-Zawahiri.

Estados Unidos lo incluyó en su lista de terroristas en mayo de 2013 como “terrorista global especialmente designado”.

Separación de Al Qaeda

En 2016, al-Jolani anunció que al-Nusra había cambiado su nombre a Jabhat Fateh al-Sham y había roto vínculos con al-Qaeda.

Esta ruptura de vínculos no fue aceptable para la comunidad internacional y en mayo de 2017 el FBI ofreció una recompensa de 10 millones de dólares por información que condujera a su identificación o ubicación.

A principios de 2017, Jabhat Fateh al-Sham anunció la formación de Hayat Tahrir al-Sham (HTS), una coalición entre este grupo y otros grupos yihadistas como Jabhat Ansar al-Din, el Ejército de la Sunnah, Liwa al-Haq y el Movimiento Nur al-Din al-Zenki, y que posteriormente incluyó más facciones y grupos.

En octubre de 2017, se aceptó la renuncia de Hashim al-Shaykh (Abu Jaber) a su cargo de comandante del HTS, y se le encomendó a al-Jolani la gestión de los asuntos de la facción.

Desmantelamiento de los movimientos yihadistas

Cada vez que la Coalición Internacional ataca a organizaciones yihadistas en Idlib, se apunta a al-Jolani, especialmente porque es buscado.

Se acusa a Tahrir al-Sham de estar detrás de estas operaciones y de proporcionar inteligencia a la Coalición Internacional para eliminar a los yihadistas, a pesar de que el HTS niega tener una política sistemática hacia los inmigrantes extranjeros (combatientes) en general.

En febrero de 2022, fue notable que Tahrir al-Sham retrasara su respuesta a una operación aérea estadounidense en el norte de Idlib que tuvo como objetivo al líder del Estado Islámico, Abdullah Qardash, conocido como “Abu Ibrahim al-Hashimi al-Qurashi”, junto con al menos 13 personas, incluidos seis niños y cuatro mujeres.

Después de cuatro días, el HTS declaró que condenaba y denunciaba el asesinato de civiles y negó cualquier conocimiento previo de la operación antes de que ocurriera.

El 3 de agosto de 2023, el Estado Islámico acusó a Tahrir al-Sham de matar al líder de la organización “Abu al-Hussein al-Husseini al-Qurashi”, afirmando que el HTS entregó a “Abu al-Hussein” al gobierno turco “como muestra de lealtad y fidelidad” al presidente turco Recep Tayyip Erdoğan, para proporcionarle un logro en su campaña electoral.

La edad juega un papel

En los últimos días se han emitido circulares con mensajes de “tranquilidad” tanto para el frente interno como para el internacional, reflejando un cambio en el comportamiento del HTS, especialmente con sus declaraciones dirigidas a las minorías y sectas, junto con instrucciones de no dañar o violar por razones étnicas o sectarias.

El tono fue completamente diferente de lo que afirmó Al-Jolani en 2015, cuando enfatizó la protección de las aldeas drusas y cristianas en el campo de Idlib, enviando predicadores islamistas a sus aldeas para aclarar sus errores, según expresó, y creía que los cristianos se someterían al gobierno islámico si se estableciera un sistema islámico en Siria, comprometiéndose a protegerlos.

En diciembre de este año, en una entrevista con CNN , al-Jolani atribuyó los cambios que experimentó a lo largo de los años, desde la organización de Al Qaeda hasta los intentos de moderación, al factor edad.

Afirmó que “una persona de veinte años tendrá un carácter diferente al de una persona de treinta o cuarenta años, y ciertamente al de una persona de cincuenta años; esto es la naturaleza humana”.