La campaña de Biden teme que el informe de documentos clasificados revele ‘detalles embarazosos’
El fiscal general Merrick Garland recurrió al fiscal especial Robert Hur para investigar el asunto el 12 de enero de 2023, luego de las búsquedas del FBI
A los miembros del equipo de reelección del presidente Biden para 2024 les preocupa que un informe del Departamento de Justicia sobre su retención de documentos clasificados revele “detalles embarazosos”, según un nuevo informe.
El fiscal general Merrick Garland recurrió al fiscal especial Robert Hur para investigar el asunto el 12 de enero de 2023, luego de las búsquedas del FBI en la oficina posterior a la vicepresidencia de Biden en Washington, DC y en la mansión de Delaware en busca de archivos confidenciales.
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Más de un año después, el bando de Biden anticipa que el equipo de Hur publicará su informe final sobre la investigación de documentos clasificados tan pronto como esta semana, con información y fotografías que podrían complicar el esfuerzo de reelección del presidente, informó Axios.
Un portavoz de la campaña de Biden no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
Los abogados de Biden descubrieron al menos una docena de archivos clasificados en la oficina de su grupo de expertos Penn Biden Center en la capital del país el 2 de noviembre, algunos de los cuales estaban relacionados con el Reino Unido, Ucrania e Irán.
El descubrimiento no se reveló hasta después de las elecciones de mitad de período, en las que los demócratas superaron las expectativas. El abogado personal de Biden encontró más archivos de inteligencia en la biblioteca y el garaje de la casa del presidente en Wilmington, Delaware, ese diciembre.
El FBI registró la oficina, la casa y la residencia de Biden en Rehoboth Beach entre noviembre de 2022 y febrero de 2023, y registró documentos clasificados adicionales en la ubicación de Wilmington.
El primer hijo, Hunter Biden, tuvo acceso a los archivos guardados junto al Corvette Stingray de 1967 de su padre, según fotografías encontradas en su computadora portátil abandonada, que fueron tomadas el mismo día que envió un mensaje de texto amenazante a un asociado chino que invocaba a su padre para cerrar un siete -cifra de negocio el 30 de julio de 2017.
Otra foto que Hunter tomó a principios de ese año mostraba un cuadro con la etiqueta “Documentos importantes [sic] + Fotos“. No está claro qué contenía, pero algunos informes dicen que Biden padre pudo haber guardado materiales para informar sus memorias de 2017, “Promise Me, Dad”.
Biden, de 81 años, ha descartado el escándalo calificándolo de una pelea por “papeles perdidos”, diciendo que los archivos se guardaron “en un garaje cerrado” y que está “cooperando plenamente” con la investigación de Hur.
El presidente se presentó a una entrevista “voluntaria” en octubre, y su hijo fue entrevistado el mes siguiente como parte de esa investigación, que supuestamente involucró a más de 100 testigos.
Los republicanos de la Cámara de Representantes están llevando a cabo actualmente una investigación de juicio político contra Joe Biden en busca de evidencia de que abusó de su cargo como vicepresidente o se benefició personalmente de los planes de tráfico de influencias de Hunter con entidades extranjeras.
El Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes ha programado entrevistas con Hunter y su primer hermano James Biden para finales de este mes que se espera arrojen más luz sobre el alcance de sus enredos comerciales en el extranjero, que recaudaron más de $17 millones para la primera familia y sus asociados durante e inmediatamente después del tiempo de Joe en la Casa Blanca de Obama.
El fiscal especial Jack Smith acusó al expresidente Donald Trump en junio de 2023 de haber retenido también material sensible en su propiedad de Mar-a-Lago después de dejar el cargo en enero de 2021, y luego mentir a las autoridades federales que buscaban la información.
Smith acusó a Trump, de 77 años, de 40 cargos de ocultar archivos de inteligencia estadounidenses, incluso a su propio abogado, algunos de los cuales estaban marcados como “alto secreto”, y de reclutar a su valet y a un empleado del resort para ayudarlo a ocultar los documentos al Departamento de Justicia y FBI.
Los Archivos Nacionales solicitaron repetidamente al expresidente que devolviera cientos de documentos antes de remitir el asunto al Departamento de Justicia a principios de 2022.
Posteriormente, los fiscales federales formaron un gran jurado y autorizaron una búsqueda del FBI en la residencia de Trump en Palm Beach, Florida, el 8 de agosto de 2022, que reveló 102 documentos clasificados que no habían sido proporcionados voluntariamente.
Las fotos publicadas como parte de la acusación mostraban cajas de los materiales almacenados en un salón de baile, un dormitorio, un baño y un sótano con entrada inmediata al exterior “que a menudo se mantenía abierto”, según los fiscales.
El exabogado de Trump había certificado meses antes al Departamento de Justicia que todo el material sensible de inteligencia había sido entregado, sin saber que algunas cajas que contenían los documentos le estaban ocultas.
La jueza de distrito estadounidense Aileen Cannon ha programado actualmente la fecha del juicio para el 20 de mayo de 2024 en el Distrito Sur de Florida.
