La pista fantasma: Banorte y la Conade, bajo la dirección de Ana Guevara, estafan al SAT con proyecto inexistente

Un escándalo relacionado con la construcción de una pista de salto ecuestre que nunca existió, financiada mediante un programa de estímulos fiscales del gobierno federal, ha sido destapado. La Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade) ha sido señalada por avalar esta construcción ficticia, financiada por la Operadora de Fondos Banorte, en lugar de destinar los recursos al Servicio de Administración Tributaria (SAT).

El proyecto, que recibió un financiamiento de 15 millones de pesos por parte de Banorte, debía ser construido en el Centro Nacional de Desarrollo de Talentos Deportivos y Alto Rendimiento (Cnar) en la Ciudad de México, según lo autorizado en 2021. Sin embargo, en lugar de la pista de salto ecuestre, se encontró una pequeña pista para ciclismo BMX que apenas cumplía con los requisitos mínimos para su uso.

La construcción fantasma de esta pista de salto ecuestre fue simulada por la Conade, quienes presentaron un acta de entrega-recepción de trabajos firmada por diversas partes involucradas, incluyendo representantes de la Conade, la empresa constructora y de Banorte. Según este documento, los trabajos se llevaron a cabo durante nueve meses, pero en realidad no se realizó ninguna obra significativa en el lugar.

PROCESO EXPONE DOCUMENTACIÓN FIRMADA POR LA CNAR, LA EMPRESA CONSTRUCTORA Y BANORTE QUE AVALA LA “ENTREGA DE LA PISTA”

El medio de comunicación PROCESO, quien expuso este caso, posee una copia del “acta de entrega-recepción física de los trabajos”, en la que se registra que a las 13 horas del día 30 de septiembre, se presentaron en las instalaciones la entonces directora del CNAR, Cinthya Maribel Leyva Roa, y el jefe del Departamento de Mantenimiento y Servicios de dicha instalación, Arturo Nicolás Paulino, quienes firmaron el documento como recibido.

Presuntamente, también estuvieron presentes el representante legal de Arquitectura Ecuestre, S de RL de CV, la empresa supuestamente encargada de construir la pista, Fernando Gonzalo Fernández Fernández, junto con su testigo, Juan Ignacio Morales Martínez. Asimismo, se menciona la presencia de los representantes legales de Banorte, Faustino Alcantar López y Hugo Austria Díaz, quienes aparentemente simularon la entrega de la obra.

Además, el proyecto presentaba inconsistencias graves, ya que se mencionaba la construcción de una serie de instalaciones adicionales que nunca se llevaron a cabo. Estas incluían caballerizas, áreas para atención veterinaria, un estercolero, entre otros, que nunca llegaron a materializarse.

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¿EN DÓNDE QUEDARON LOS 15 MILLONES DE PESOS DESTINADOS A LA CONSTRUCCIÓN DE LA PISTA ECUESTRE?

Este desvío de fondos viola la normatividad del Estímulo Fiscal al Deporte de Alto Rendimiento (Efideporte), que establece que el dinero destinado para los proyectos autorizados no debe ser desviado de su objetivo. Además, el contribuyente aportante, en este caso Banorte, debe garantizar que los recursos se apliquen correctamente, algo que claramente no sucedió en este caso.

El escándalo se agrava con la participación activa de Banorte en el programa Efideporte, siendo uno de los contribuyentes más activos desde 2018, con aportaciones que suman más de 111.4 millones de pesos. Estas aportaciones supuestamente estaban destinadas a proyectos de alto rendimiento, pero la realidad demuestra lo contrario.

La Operadora de Fondos Banorte ha declarado que ha iniciado una investigación interna sobre el caso, pero sostiene que cumplió con todos los lineamientos establecidos y que un auditor independiente certificó que la empresa constructora aplicó el monto autorizado en los conceptos de gasto aprobados. Sin embargo, estas declaraciones han sido recibidas con escepticismo por parte de la opinión pública.

¿QUÉ ES EL EFIDEPORTE?

El EFIDEPORTE, Estímulo Fiscal al Deporte de Alto Rendimiento, es un beneficio dirigido a los contribuyentes que realizan aportaciones a proyectos de inversión en infraestructura e instalaciones deportivas, así como a la implementación de programas orientados al deporte de alto rendimiento.

Este estímulo fiscal permite a personas físicas y morales que pagan impuesto sobre la renta contribuir con recursos destinados a proyectos de inversión en infraestructura deportiva o programas para la formación de deportistas de alto rendimiento, tanto en deporte adaptado como convencional. Los contribuyentes pueden acreditar el monto de su aportación contra el pago del impuesto sobre la renta que les corresponda en su declaración anual.

El objetivo principal del EFIDEPORTE es respaldar proyectos de inversión relacionados con la construcción, ampliación, rehabilitación, remodelación, remozamiento, rescate o mejoramiento de instalaciones deportivas. Además, busca promover el desarrollo de programas integrales para la formación de deportistas de alto rendimiento.

El monto de la aportación a un proyecto o programa no puede exceder los 20 millones de pesos por contribuyente, proyecto o programa, ni el 10% del impuesto sobre la renta del contribuyente causado en el ejercicio anterior. Sin embargo, el Comité correspondiente puede autorizar montos mayores a 20 millones de pesos para proyectos que lo requieran debido a su magnitud, siempre y cuando cumplan con las disposiciones establecidas en las Reglas Generales.

BANORTE EN PELIGRO DE ENFRENTAR AL SAT POR EL DINERO DESTINADO A LA PISTA ECUESTRE

En caso de confirmarse el desvío de fondos, Banorte enfrentaría la revocación del estímulo fiscal por parte de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), y estaría obligado a pagar el monto correspondiente al Servicio de Administración Tributaria (SAT), así como recargos adicionales.

Hasta el momento, tanto la Conade como la Secretaría de Hacienda no han emitido comentarios sobre este caso, lo que aumenta la incertidumbre sobre las acciones que tomarán para abordar esta situación. Los atletas mexicanos y el deporte nacional merecen una explicación clara y acciones contundentes para evitar que casos como este se repitan en el futuro.