Mira Murati, la jefa de tecnología de OpenAI y desarrolladora del ChatGPT, es una de las mujeres más poderosas del mundo

Recientemente, el nombre de Mira Murati, la jefa de tecnología de OpenAI, ha salido de la oscuridad en diversos medios de comunicación.

Su lugar de nacimiento está en discusión, ya que algunas fuentes afirman que nació en San Francisco, Estados Unidos y otros que en Viore, Albania, pero es indiscutible que sus padres proceden de aquel país de Europa del este.

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Nació en 1988, estudió Ingeniería Meánica en Dartmouth, College, hizo una pasantía como analista en Goldman Sachs.

Pasó a trabajar como ingeniería de conceptos avanzados en la compañía aeroespacial francesa ‘Zodiac Aerospace’, después de lo cual fue nombrada gerente senior de productos en Tesla para su vehículo ‘Model X’.

Murati tuvo un período de dos años como vicepresidente de productos e ingeniería en Leap Motion, una compañía de software y hardware que fabrica controladores que permiten a los usuarios manipular objetos digitales con los movimientos de sus manos cuando se conectan a una PC o Mac. Durante el comienzo del mandato de Murati en Leap Motion, la compañía lanzó un nuevo software diseñado para el seguimiento de manos en realidad virtual.

En 2018, Murati se unió a OpenAI como vicepresidente de IA aplicada y asociaciones. En ese momento, OpenAI ya estaba aumentando el trabajo de investigación y elaborando facturas más grandes de las que eventualmente podrían manejar. En 2019, OpenAI pasó de ser una organización sin fines de lucro a una entidad con fines de lucro, aunque con un límite.

Murati luego escaló para convertirse en vicepresidente senior de Producto y Asociaciones en la empresa antes de convertirse en Director de Tecnología hace diez meses. Desde el nombramiento de Murati como CTO, OpenAI ha lanzado algunos de sus juguetes de IA más populares, como DALL.E 2 y ChatGPT, que se han abierto camino al público.

En 2021, el equipo contrató a Jan Leike, un investigador de ML, que ahora lidera su equipo de alineación, lo que indica un mayor enfoque en el aprendizaje de refuerzo a partir del entrenamiento de retroalimentación humana ( RLHF ).

Murati ha estado trabajando en estrecha colaboración con Leike, como es evidente en Twitter, y también ha discutido la importancia de incorporar comentarios durante el entrenamiento de modelos de IA. En una discusión hace ocho meses con CogX, explicó: “Queremos que estos modelos sigan nuestras instrucciones explícitas, pero también queremos que sigan nuestras instrucciones implícitas, por lo que no queremos que produzcan estereotipos ni generen respuestas dañinas. Queremos que se alineen principalmente con lo que queremos decir o queremos, lo que puede ser bastante confuso. Para llegar allí, necesitamos retroalimentación humana en el circuito para que el modelo haga que la intención sea más nítida”.

En el mismo panel de discusión, mientras elogiaba el impacto general de la IA, admitió francamente que no sabía si las herramientas de IA eventualmente terminarían reemplazando los roles laborales humanos. “No estamos seguros de si AGI nos reemplazará por completo o aumentará lo que estamos haciendo. No está claro qué sucederá con los empleos, cómo serán los sistemas de gobernanza o económicos. Pero creo que puede tener un impacto muy positivo en general en el sentido de que puede resolver problemas muy difíciles del mundo real como el cambio climático o el tratamiento médico de enfermedades”.

OpenAI siempre ha tenido un enfoque franco para admitir lo que sus herramientas pueden o no pueden hacer, lo que Murati también ha adoptado claramente. Sin embargo, también ha aceptado que algunas de estas preguntas, como las implicaciones exactas de AGI en los humanos, pueden ser demasiado grandes para responder ahora incluso demasiado abiertas.

En una entrevista reciente con la revista Time, Murati pidió la regulación de la IA diciendo que no era “demasiado pronto” para que los políticos se involucraran en la IA. “Es importante para OpenAI y empresas como la nuestra traer esto a la conciencia pública de una manera controlada y responsable. Pero somos un pequeño grupo de personas y necesitamos muchos más aportes en este sistema y muchos más aportes que vayan más allá de las tecnologías, definitivamente reguladores, gobiernos y todos los demás”, explicó.