En viñedo de Hermosillo explotaban a Nancy y Mari

 Puebla. Nancy González Pérez de apenas 15 años de edad y su hermanita Mari de 5, retornaron a Puebla con leves secuelas de desnutrición y deshidratación tras ser explotadas durante 17 días en un viñedo de Hermosillo Sonora.

Ellas forman parte de un grupo de 66 poblanos que fueron engañados por `coyotes' que les prometieron un empleo digno, salarios justos y una vivienda en aquella demarcación.

Este viernes, tras un viaje de 28 horas, volvieron los primeros 66 rescatados, entre ellos siete mujeres, dos infantes de 5 y 8 años; y 20 menores de edad. En Hermosillo se quedaron otros 16 `esclavos', entre ellos los padres de Nancy y Mari, las autoridades no lograron salvar a todos.

Desde el pasado 10 de mayo -cuenta Nancy- un señor llamado Gilberto, del que nadie recuerda el apellido, persuadió a varias familias del municipio de San Gabriel Chilac en Puebla de abandonar esas pobres tierras e irse a cosechar uvas ganándose 10 pesos por cada caja de frutos.

Sin embargo, al llegar al rancho Viñedo 2000 las promesas se esfumaron, todos fueron alojados en galeras en las que dormían amontonados.

Las extenuantes jornadas excedían las 10 horas. Hace una semana recibieron el pago único de 400 pesos, pero poco les duró pues el derecho a desayunar, comer y cenar tenía un costo de 42 pesos diariamente.

"Jamás nos maltrataron, no nos golpearon, ni nos ofendieron, pero no nos dejaban salir, nos prometieron que tendríamos cuartos, pero no, todos estábamos en las galeras, ahí dormíamos y ocupábamos el mismo baño", platicó la adolescente.

¿POR QUÉ SE FUERON FAMILIAS COMPLETAS?

Ciriaco Montalvo Montalvo de 16 años es otra víctima, él se fue con un grupo de amigos que conocen desde hace muchos años a la familia González Pérez, todos son originarios de Chilac y prometieron cuidarse unos a otros.

"Allá no hay trabajo, la mayoría de gente se dedica a la maquila, pero está mal pagado les dan entre 400 y 650 pesos a la semana, a eso nos dedicábamos antes de agarrar este trabajo, nos convencieron, pero ya vimos que no funcionó, que no fue cierto", expresó el joven cuyo rostro, además de avergonzado, está dañado por el sol.

Ciriaco y Nancy expresaron su preocupación por los 16 poblanos que aún están en el Viñedo 2000. En tanto, ella y su hermanita se quedarán con alguna de sus tías, pero está preocupada por la incertidumbre de ver o no retornar a sus padres.

Los adolescentes platicaron a EL UNIVERSAL que calculan que al menos otras 200 personas -provenientes de todos los estados de la República- estaban recluidas en el rancho de Hermosillo. Concluyeron la charla para comer un tamal de mole, cinco galletas y tres vasos de refresco que la Comisión Estatal de Atención al Migrante les ofreció.

GOBIERNO DE PUEBLA DESCONOCE IDENTIDAD DE CONTRATISTAS Y DIRECCION DEL VIÑEDO

En tanto, Héctor Escobar González, Alto Comisionado de Atención al Migrante Poblano, advirtió que el gobierno local demandará a quien resulte responsable del reclutamiento y explotación de estas personas.

No obstante, desconoció la identidad de los llamados `coyotes' y el nombre del propietario del Viñedo 2000, incluso no precisó la dirección exacta del lugar en el que explotaban a los 66 rescatados y retienen a otros 16.

"Establecimos contacto con el gobierno de Sonora, ellos se portaron muy bien, porque fueron por ellos al rancho y de ahí los llevaron a Hermosillo. Nos enteramos porque alguno de ellos mandó un mensaje de texto, su familia le hizo una recarga y así mantuvimos contacto", explicó.