Omar Gato Ortiz trasciende en el mundo por su detención

Ciudad de México.- Hace dos años, cuando Omar Ortiz fue asaltado por hombres armados para quitarle su camioneta de lujo en la ciudad de Monterrey, algunos medios calificaron el incidente como un episodio de alguien que pasa `de la gloria al infierno', porque luego de una buena carrera deportiva, llegaron los hechos desafortunados.

Omar acababa de jugar el partido de Copa Libertadores contra el Nacional de Paraguay y había acudido a cenar con su esposa y dos de sus hijos, tras lo cual fue víctima de la delincuencia y según afirmo entonces, ya llevaba cuatro incidentes de inseguridad desde que regresó a jugar con los Rayados de Monterrey.

Posteriormente vino el positivo en una prueba antidoping que le dejó como consecuencia dos años de suspensión como futbolista, mismos que se cumplirían en abril de este año. Omar dio positivo en las sustancias oximetholone y dromostanolona, según exámenes cuando transcurría la fecha 9 del Torneo Bicentenario 2010.

Si Omar Ortiz resulta culpable de las imputaciones que se le hacen por su presunta participación en diversos plagios, su carrera futbolística habrá terminado.

Medios informativos como El País y El Mundo -de España- reproducen lo que portales y periódicos mexicanos difundieron anoche como el sorpresivo desenlace de lo que en principio se temió como desaparición del futbolista, para terminar en un caso de investigación policiaca y la acusación de presunto partícipe en una banda de secuestradores.

Ortiz jugó con el Monterrey (en 1997-2001), Celaya (2001-2002), Monterrey (2002-2003), Chiapas (2003-2008), Necaxa (2008-2009) y había regresado a Monterrey (2009-2010) cuando fue sancionado por dopaje.

Por lo pronto, el jefe de la banda a la que `El Gato' servía como informante, está prófugo junto con seis de sus cómplices.