‘Una probada incompetente’, así califica Riva Palacio a Rosario Piedra, cuya reelección en la CNDH dividió a Morena
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Asevera el periodista que la de Piedra fue una reelección forzada para respetar la orden del expresidente López Obrador, pese a que ella no estaba ni en los ánimos de Sheinbaum no en la de la mayoría de los morenistas
CDMX.- Tras forzar el consenso, Morena reeligió al frente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) a Rosario Piedra Ibarra, a quien Raymundo Riva Palacio califica como “una probada incompetente”.
En una maratónica sesión en el Senado, que concluyó la madrugada de hoy, Piedra Ibarra alcanzó a imponerse con 87 votos a favor sobre Nashieli Ramírez, quien obtuvo 36 votos.
En su columna “Estrictamente Personal”, Riva Palacio asevera que se trató de una reelección forzada que dividió a los morenistas, pues al menos una tercera parte no estaba de acuerdo a votarla para un segundo periodo por su notoria incompetencia.
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“La vergüenza de respaldar a una probada incompetente, cuyo único mérito fue haber ayudado a López Obrador a colonizar y neutralizar a la CNDH, pesó en la división”, expone el columnista.
Piedra tampoco era la candidata de la presidenta Claudia Sheinbaum, sino Ramírez. Sin embargo, el editorialista asevera que fue el expresidente Andrés Manuel López Obrador quien dio línea para se “reeligiera a su protegida”.
El encargado de esa tarea fue el senador Adán Augusto López, quien no la tuvo fácil, afirma el periodista.
“No fue una tarea fácil para el coordinador del grupo, Adán Augusto López, ni para el cerebro detrás de él, Alejandro Esquer, el exseceretario particular de López Obrador, que es quien transmite las instrucciones desde Chiapas”, detalla.
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Todavía ayer en la tarde, no había consenso entre los morenistas, quienes tuvieron varias reuniones, incluso una de ellas con Piedra Ibarra, con el fin de lograr la votación a su favor.
“La increíble búsqueda de la reelección de una funcionaria desacreditada, moralmente cuestionada, pero que sirvió al expresidente a costa de su propia imagen y la historia de su familia, dividió a Morena como nunca había sucedido desde 2015, cuando tuvo su primera bancada, por el rechazo mayoritario a Piedra”, apunta.
Pero el consenso no fue el único reto que tuvo el ala dura de Morena, que tras varias horas de “jaloneos” con el PAN, que demandaba una votación transparente, definieron una votación por cédula.
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La reelección de Rosario Piedra al frente de la CNDH estaba en “interés de López Obrador”, quien se “metió abiertamente en el proceso”, asegura Riva Palacio.
Piedra Ibarra fue la peor evaluada de los candidatos a encabezar la Comisión Nacional de Derechos Humanos y había quedado fuera de la terna.
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Morena y sus aliados habían seleccionado a Paulina Hernández Diz, secretaria ejecutiva del Instituto Jalisciense de las Mujeres; Nashieli Ramírez, titular de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México, y Tania Ramírez, directora de la Red por los Derechos de la Infancia.
Hasta que la orden llegó desde Palenque, donde vive actualmente López Obrador, y eliminaron “sin explicación alguna a Tania Ramírez, pese a haber sido la segunda con mayor puntaje”, refiere el editorialista.
Esa fue la primera irregularidad cometida por los senadores morenistas para cumplir la instrucción del expresidente; la segunda, señala el periodista, fue haber solapado que Piedra Ibarra entregara entre sus documentos una carta apócrifa de apoyo supuestamente del obispo emérito de Saltillo, Raúl Vera.
Pese a todas las irregularidades y no ser la candidata de Palacio Nacional, el expresidente se impuso sobre Sheinbaum.
“Sheinbaum quería en el cargo a Nashieli Ramírez, una experimentada defensora de derechos humanos, con quien trató cuando fue jefa de Gobierno de la Ciudad de México... Las lealtades de la dirigencia de Morena en el Senado, sin embargo, no estaban en el campo de la Presidenta, sino del expresidente”, asevera el articulista.
La reelección de Piedra Ibarra podría tratarse de una doble derrota para Sheinbaum, quien no respaldaba a la actual titular de la CNDH y se ha pronunciado por estar en contra de la reelección de cargos.