El escandaloso Atlas
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Antes de que se esponjen mis amigos y familiares rojinegros, esta columna no es un espacio para tirarle al tremendo proyecto del Atlas, el bicampeón actual y el equipo que le ha dado nuevas alegrías a la afición que más años aguantó de pie.
Lo que me gustaría es generar una verdadera conversación para analizar a fondo lo que hoy se vive en la famosa “madriguera”.
No es de sabios entender que estamos ante un bache real del proyecto más disciplinado y constante de los últimos años.
Me voy explicar aún mejor: El equipo de menor presupuesto que logró ser campeón en los últimos 10 torneos fue el Atlas, que —además de haber sido reforzado hace un año y medio de forma muy inteligente por Grupo Orlegi— entendió, gracias a Diego Cocca, el factor del orgullo, para saber cómo tenía que jugar y cambiar la narrativa de “A lo Atlas” con tragedias, para lograr grandes victorias.
Ahí encontraron un equipo muy bien trabajado, disciplinado, pero también muy compacto y con un plantel muy justo.
Es decir, muy pocos cambios y jugadores que ayuden a encontrar soluciones desde la banca.
El 11 titular rojinegro es entrón, poderoso; no el mejor en cuanto a calidad e inversión, pero sí en capacidad para mostrar semana a semana sus fortalezas.
Un eje bien estructurado con el mejor arquero de la Liga, un par de defensas centrales muy cumplidores, el mejor escudo del campeonato y dos delanteros con mucho poder. Uno de ellos, viviendo su mejor año en México, generando una revancha personal después de episodios muy indisciplinados.
Así es como se gestó el poder de este equipo, que ha contado con la fortuna y también con el elementos por las bandas que ayudan a recuperar y a contragolpear.
El problema es que el trajín del calendario los alcanzó, las lesiones también y de ahí —en lugar de vivir una campeonitis— lo que vive refleja que, con un calendario tan apretado y con la carga de trabajo de ese plantel, Atlas hoy no tiene ese fondo de vestuario para seguir compitiendo en la parte alta.
Será clave para Cocca entender lo que viene en el mes y medio que le queda al torneo para volver a recuperar al cierre, si puede, el ritmo de juego de sus últimas dos Liguillas.
Luce difícil, pero algo ya nos enseñó este proyecto: Tienen ganas de seguir haciendo historia, aunque sus piernas hoy no den para más.
¡Bienvenidos, bienvenidos! Al escandaloso Atlas bicampeón, que vive horas bajas.