El Instituto Universitario Ortega-Marañón y la Academia IDH
En el mes de noviembre del año pasado, en un evento que la Academia IDH organizó en su sede histórica del centro de la ciudad, tuvimos la oportunidad de generar una nueva relación de colaboración académica con el Instituto Universitario Ortega-Marañón, la cual es una institución académica reconocida a nivel internacional, adscrita a la Universidad Complutense de Madrid (UCM).
Durante sus más de 30 años de existencia, el Instituto Ortega-Marañón ha formado a miles de alumnos y alumnas que han cursado diferentes estudios de Posgrados en áreas de conocimiento incluidas en las Ciencias Sociales, las Humanidades y las Ciencias de la Salud.
Es, como lo describen ellos en su web, una “comunidad académica, abierta, plural e independiente, que ante todo propicia la generación de personas talentosas”, el principal valor, sin duda, que tiene una sociedad para construir un mejor futuro generacional. Ese es el legado de líderes intelectuales como Ortega y Marañón, dos grandes personajes de la historia contemporánea de España que han influido en la formación de grandes líderes hispanos en América Latina.
Hace algunas semanas, la Academia IDH formalizó su convenio con dicho centro universitario para construir una buena relación académica que favorezca, a decir de Ortega y Gasset, las nuevas circunstancias de la vida que propicien mayor talento en nuestra comunidad universitaria. Es el primer convenio que dicha institución celebra en este 2023 con una renovada imagen e instalaciones que de manera reciente inauguró el Rey de España.
La Academia IDH cumple así y próximamente sus ocho años. Es una niña todavía. Pero su periodo de gestación fue más largo. Eso le da hoy mucha madurez, fortaleza y carácter para poder interactuar de manera fructífera con instituciones de gran prestigio y relevancia internacional.
Este año es clave para los que formamos parte de la Academia IDH. Estamos en proceso de cerrar una etapa de consolidación y abrir una nueva que representa cambios importantes para nuestro futuro generacional, a partir de su razón de ser: un centro de excelencia académica comprometido con la educación e investigación de los derechos humanos.
El director del Instituto Ortega-Marañón, el doctor Antonio López Vega, me invitó hace algunas semanas a dar una plática en su sede principal sobre el principal problema de los derechos humanos, la desaparición forzada de personas. Fue un espacio de reflexión académica con destacados profesores y profesoras, para compartir mi experiencia profesional de la última década en la agenda de los derechos de las personas desaparecidas que, ahora como juez, me representa nuevos retos y desafíos para las diferentes cuestiones de justicia que enfrenta nuestra sociedad mexicana.
Espero que la Academia IDH continúe desarrollando más y mejores relaciones institucionales con prestigiosos centros de investigación. Al final, las personas y las instituciones crecemos en función de las otras personas e instituciones que nos hacen siempre nuestra mejor versión. Ese es el futuro morado: nuevas relaciones, nuevas oportunidades y nuevos proyectos que influirán en crear el mejor talento de nuestra generación universitaria.
VISIÓN FUNDACIONAL
Ya quedó atrás la fundación de la Academia IDH. Estamos cerrando una primera etapa de consolidación con lo que será la inauguración del edificio morado en los próximos meses.
A los que formamos parte de este proceso de transformación social, nos corresponde ahora hacer mejor nuestra función académica para generar mayor talento, esfuerzo y compromiso para la protección de los derechos humanos.
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