El mediocre legado de López Obrador
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A pesar de su popularidad actual, es muy probable que Andrés Manuel López Obrador pase a la historia como un Presidente mediocre, porque careció de grandes logros en su gobierno; por ejemplo, hizo grandes apuestas por tres obras de gran envergadura, que consumieron parte importante del presupuesto público, pero que al menos hasta el momento han tenido escasos resultados.
El Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles apenas es el sexto en tráfico aéreo del país y hace apenas unas semanas comenzó a ser rentable, lo cual no es un logro para un aeropuerto ubicado en una zona metropolitana de más de 30 millones de personas, sobre todo si dicho aeropuerto costó 115 mil millones de pesos, más 113 mil millones que representó la cancelación del aeropuerto en Texcoco.
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Lo mismo pasa en la refinería de Dos Bocas, en donde se invirtió más de 235 mil millones de pesos, la cual apenas este mes comenzó a producir barriles, pero sigue debajo del 50 por ciento de su capacidad de producción, pero, además estamos viendo un incremento fuerte en el precio de la gasolina, que se traslada al precio de otros productos, provocando inflación.
El colmo es el Tren Maya, que se vendió como una atracción para atraer a más turistas y detonar desarrollo en toda la península de Yucatán, sin embargo, después de haber consumido 511 mil millones de pesos en su construcción, aún no está terminado, ha presentado muchas fallas en su operación y para colmo los turistas extranjeros no lo están usando, por lo que la derrama económica esperada está fracasando.
Tampoco tuvo un buen desempeño en prácticamente ningún indicador, la inseguridad bajó pero muy poco y como en su sexenio nos encontrábamos en los máximos históricos, en el agregado ha sido la gestión con más homicidios de la historia moderna del país, de hecho, la inseguridad se asentó en nuevos territorios y entidades que eran muy seguras perdieron la paz.
El país tampoco tuvo un gran crecimiento económico, no le fue mal, de hecho, terminará siendo muy similar al de Peña Nieto, pero tampoco se puede decir que el país creció, o que la generación de empleos fue significativa, el peso se mantuvo estable, pero la inflación también creció de manera importante reduciendo el poder adquisitivo.
La salud y la educación tuvieron importantes retrocesos, con menos personas con acceso a servicios gratuitos, decrementos en el acceso a medicamentos, deterioro de los hospitales públicos y una muy mala gestión de la pandemia, acompañada de pocas inversiones en educación superior, van a dejar una honda huella en el desarrollo de muchas personas, cuyos efectos aún no podemos dimensionar de forma adecuada.
Ello sin contar con los efectos negativos en la destrucción de contrapesos, en el debilitamiento de las instituciones, en los actos de corrupción no investigados, en el clientelismo que se generó, en el poco respeto a la libertad de prensa, o en los nulos esfuerzos para cuidar el medio ambiente.
victorsanval@gmail.com
@victorsanval