Hundimiento, otro costo más de la feroz agroindustria en La Laguna

Conocíamos los costos que ha tenido la agroindustria en la región Laguna: contaminación del agua principalmente con arsénico, mantos acuíferos abatidos, desabasto de agua o problemas de salud por la ingesta de agua con los metales pesados. Pero no habíamos puesto sobre la mesa otro costo de esta actividad económica: la subsidencia.

Esta semana publiqué en SEMANARIO el reportaje “La Laguna, literal, se hunde cada año”, un reportaje que parte de una investigación del Instituto de Geofísica de la UNAM que encontró con tecnología satelital que la región Laguna de Coahuila y Durango tiene la superficie más amplia con riesgo de subsidencia, que en geología es el progresivo hundimiento de la superficie.

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¿Qué quiere decir esto? Que en casi 3 mil kilómetros cuadrados de la región la superficie se hunde al menos un centímetro cada año. Aunque hay zonas que se hunden hasta 14 centímetros al año.

Y el problema tiene que ver con la extracción del agua subterránea a causa de la actividad agroindustrial. Al extraer agua, en términos prácticos, la superficie se va compactando y se reduce la capacidad de almacenamiento. Como dijo en el reportaje el doctor Enrique Cabral de la UNAM, es como si la cisterna de la casa se hiciera más pequeña.

Esta información, que recién públicamente se dio a conocer por primera vez, representa otro costo de la feroz agroindustria que se presume por unos, pero es la maldición de otros.

Sí, la región Laguna es la cuenca lechera más importante del país. Sí, en esta zona se produce dos de cada 10 litros de leche en el país. Sí, se tiene un hato ganadero de más de 500 mil cabezas de ganado bovino. ¿Pero a qué costo?

Así como también presume en materia económica la cuenca lechera, también representa una zona que ha atraído el reflector por los niveles de abatimiento y contaminación con arsénico. Y ahora, por ser la región con la mayor área detectada de hundimiento del país, pues es hasta cuatro veces más grande que en la Ciudad de México.

AL TIRO

La solución para enfrentar el desabasto y calidad del agua en la Comarca fue crear el proyecto de Agua Saludable para La Laguna, que en su esencia trae agua del sistema de presas para abastecer a la población. Si bien se ha dicho mucho por expertos que esta no es la solución integral al problema de sobreexplotación, es al menos una forma de mitigar de forma inmediata el problema.

Por eso es válido preguntar qué se piensa hacer para enfrentar el tema de los hundimientos a causa de la extracción desaforada del agua del subsuelo.

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Medio atender el problema de la contaminación de agua como ahora con Agua Saludable, tardó años. Previo se tuvieron estrategias fallidas como los filtros domiciliarios en La Laguna de Durango o los filtros antiarsénico que quedaron abandonados y sin conectarse en todo el territorio lagunero.

Ahora que se da a conocer el tema de los hundimientos, se está a tiempo de tomar medidas para intentar detener este fenómeno.

Como escribió el ambientalista Gerardo Jiménez: “se está poniendo en duda la viabilidad del modelo de desarrollo económico-social y ambiental actual de la región”.

De lo contrario, en algún momento terminaremos, literal, hundidos.