Ruta de Vinos y Dinos

Opinión
/ 31 mayo 2025

Podemos imaginar la experiencia. El turista es invitado a visitar bodegas y a contemplar y admirar los restos esqueléticos de la extinguida fauna jurásica.

El sabor del brindis se combina, en este periplo turístico, con la sorpresa de encontrarse frente a notables restos paleontológicos descubiertos en esta Región del Sureste del Estado de Coahuila.

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En la ruta habrá momentos para observar el proceso enológico y para disfrutar exquisitos sabores y momentos de observación, con explicación científica, de las recias construcciones óseas, articuladas en conservación admirable. Se mostrarán ejemplares de esa osamenta de fauna extinguida como efecto de la nublazón causada, siglos atrás, por el impacto de enorme meteorito, en lejanas regiones yucatecas.

DEGUSTAR Y APRENDER

La antigüedad de Vinos y Dinos hará disfrutable y admirable, en la ruta, lo que se bebe y lo que se contempla. Vino añejo y fósiles milenarios traen del pasado al presente de visitantes y dipsómanos, el placer de vista y paladar, junto con enriquecimiento científico y cultural.

La originalidad de la oferta contrasta con otras rutas gastronómicas y panorámicas, despertando ésta curiosidad por asomarse al pasado desde un exquisito brindis presente.

Cada bodega presentará la aventura de los racimos colgados de la parra hasta llegar a la botella, después de envejecer sabrosura en barril.

Se combina con esa zoología, de pasadas eras, que presenta, ahora, las recias y enormes trabazones óseas que hicieron posible la agilidad y la agresividad, en lejanos ayeres de estas tierras norteñas.

SUFRAGIO O NAUFRAGIO

Eso del domingo parece una navegación sin aptitud ni rumbo, con brújula perdida y calma chicha. Se parece al café descafeinado, al arroz con leche sin arroz, al agua deshidratada porque es voto sin votabilidad.

Se reparten acordeones para no reprobar. Cancelando libertad e imponiendo manipulación. Solo eso sería suficiente para declarar nula una elección.

Las opciones son: rojo o colorado, ignorado o desconocido, izquierdo o zurdo, malo o peor, inepto o aficionado, ignorante o inexperto... Unos que pueden votar con credencial, dicen: “¿a qué voy?” y otros “Sí iré a anular lo que no puede ser un voto sino solo complicidad”. Se vislumbra ya un naufragio dominical de lo que quiso ser un intento de “sufragio”...

TÉ CON FE

-¿Es posible no contagiarse de lo que se quiere curar, en otro, que está enfermo?

-Es el actual reto eclesial.

Solo una Iglesia desmundanizada puede curar un mundo enfermo de indiferencia, relativismo, egolatría, discordia y desesperanza.

Lo más potente para dar salud integral es “oración, discernimiento, misión y consagración” ha dicho León, el pontífice, al presentar, en homilía de la Ascensión, la “iniciativa de los centinelas”.

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Columna: Claraboya. El autor de Claraboya, quien ha escrito para Vanguardia desde hace más de 25 años, intenta apegarse a la definición de esa palabra para tratar de ser una luz que se filtra en los asuntos diarios de la comunidad local, nacional y del mundo. Escrita por Luferni, que no es un seudónimo sino un acróstico, esta colaboración forma ya parte del sello y estilo de este medio de comunicación.

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