Tour Culinario: De Güicho y Mina a la Cantina de A Lado

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Partimos con el recorrido de esta semana desde el “portal” al Ojo de Agua y hasta la calle por donde Agustín Jaime bajaba a caballo.
Güicho y Mina
Estos recorridos gastronómicos que no solo nos hacen mover el bigote, nos llevan a indagar cada vez más en los recovecos que existen al Centro Histórico. Cerca del callejón del Caracol (que estaría muy bien que lo iluminaran), antes de llegar se encuentra Güicho y Mina.
Un espacio de comida contemporánea mexicana, sus propietarios Cynthia y Renan, los dos estudiados y recibidos de la escuela Superior de Gastronomía de la Universidad de Durango, llegaron hace unos años a ofrecernos su propuesta. En una casona bien restaurada al estilo entre moderno y antiguo. Se dejaron los detalles arquitectónicos como testigos de su años y eso la hace maravillosa.
Estos chicos han “vagado” por Europa, Latinoamérica y han trabajado en restaurantes Michellin, como Máximo Bistrot de la Ciudad de México. Con ese estilo fresco día a día ofrecen su propuesta con ingredientes de calidad y excelentemente bien ejecutado.
Tienen especiales que duran corto tiempo y te regalan la experiencia gastronómica que estás buscando. Cuenta con área para niños, una terracita coqueta, tienen buenos tragos además de buena cava. Sus salones son cómodos, están climatizados.
No sufra pensando en la estacionada, puede hacer su recorrido desde la plaza Ateneo y estacionarse sin problema. Los domingos cuentan con desayunos. Recuerde que la calle de General Cepeda está abierta hace ya un mes.
Aún seguimos pensando qué pecados cometimos, tomando en cuenta que no quedó como esperábamos, al menos ya no tiene baches y puede circular bien y disfrutar de los sitios que se ubican en esta calle que ofrecen sus servicios.
Recuerde que es el portal a la iglesia del Ojo de Agua. General Cepeda #351.
Al Lado
¿Vamos a la cantina? Nosotros muy privilegiados, ya que tenemos La Cantina de A Lado. Una casona preciosa y bien restaurada, sobre la calle de Bravo, sus salones son unos clásicos , su patio es para tragos memorables. La cocina yucateca es lo que caracteriza a esta bella cantina que nos recuerda la democracia de la mesa.
La botana que corre por cuenta de la casa es deliciosa, la torta de cochinita pibil... ¡Bueno, sabrosa! Música en vivo los fines de semana. Taquitos, buenas salsas, cerveza helada como debe ser. Una cantina digna de visitar por este tramo de la calle de Bravo su farola le indica que ahí mero es.
Cuenta con estacionamiento.
Poncho, nuestro querido amigo y un gran cocinero que sabe que los sabores de la cantina de A Lado pueden llevarse a sus mesas en casa... A Lado congelado, una variedad de platillos congelados elaborados con la mayor calidad y los sabores tradicionales que su propietario sabe darle. Libres de conservadores y cosas extrañas este producto puede llevarlo a su mesa y tomarse una cerveza y disfrutar de los sabores de esta tradicional cantina.
La calle de Bravo es una de las calles más bonitas del centro Histórico. Su vista, su bajada, no por nada bajó por ahí Agustín Jaime. Una calle que cuenta historias, su arquitectura desde Bolivar es bella. Entre Escobedo y Juan Antonio de La Fuente se asoman unas de las casonas más despampanantes del centro. Entonces usted puede subir General Cepeda dar vuelta en Escobedo y disfrutar de estás bellas casas para llegar a La Cantina de A Lado. Un lugar de amigos , buena bebida y sin duda una exquisita botana. Es que así eran y son las cantinas y pocas existen en la ciudad .
Y Agustín bajaba, bajaba a caballo.... Inspiración de unos de los corridos más famosos del norte. Puede ser que el espíritu de Jaime ande por ahí tomándose un tequila, disfrutando de una suculenta torta en la cantina de A Lado.
Bravo # 360 pasando Aldama.
Vive Tu Centro.