Unidad no es unicidad ni uniformidad

En la naturaleza se contempla un sabio equilibrio entre la unidad y la multiplicidad.

Se observa una vida, pero muchas maneras de vivirla, desde el paquidermo y el cetáceo hasta la amiba y el microbio. En los organismos vivos se observa una multiplicidad y diversidad de órganos y funciones para hacer posible una sola vida.

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En la vida social se ha entorpecido el manejo de lo múltiple y diversificado. Se han privilegiado la unicidad y la uniformidad. Si no se quieren conflictos y desórdenes, se señala y se subraya lo único. Si hay multiplicidad, se prefiere lo uniforme.

Pero la auténtica unidad sólo es posible cuando lo mucho y distinto se hace orgánico, concorde y complementario. En el rompecabezas de la naturaleza y de las sociedades, las piezas no tienen la misma forma ni el mismo trazo y colorido. Su riqueza es la multiplicación, la distinción y el acomodo armonioso en proporciones y funciones.

MODELO EN EL UNIVERSO CREADO

El cuerpo humano no es solamente ojos o sólo brazos. Su sabia belleza es el resultado de que cada órgano tiente su función, sin querer absorber, centralizar, monopolizar. Sólo el ensamblaje de peculiaridades, con su distinción, da como resultado una vida integral y saludable.

El absolutismo, la autocracia, el autoritarismo, la dictadura, la tiranía están enfermos de unicidad. Sólo aceptan lo único. Los intentos de multiplicar se satanizan, se condenan como divisionismo inaceptable.

La única multiplicidad que se tolera es la que se uniforma con el modelo dominante. La unidad dinámica y saludable resulta imposible. Se derroca, se destituye lo único cayendo en la torpeza de instalar otra unicidad diferente, igualmente absorbente y voraz.

SE TRANSFORMA SIN MEJORAR

Las reformas resultan así deformantes. Los remedios resultan peor que la enfermedad.

Se aleja un ídolo para acercar otro.

Una pretendida transformación cambia sin mejorar o avanza más: pero por peor camino.

Se cambian estructuras sin mejorar actitudes ni sustituir agentes, ya de por sí inconsistentes o corruptos.

Sólo es posible la unidad en lo múltiple y diverso que se asemeja a la orquesta sinfónica, con tantos instrumentos, de diferente sonido, que logra fascinar con la sublime armonía de una sinfonía pautada por Beethoven.

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TÉ CON FE

-¿Qué es lo que nos roba la justicia que hace posible la paz?

-Pues mira: Se busca para uno solo lo que es de todos.

Se quiere usar sólo un camino cuando hay muchos que llegan.

Se pretende que todos caminen, cuando algunos tienen patines, otros bicicletas, algunos caballos, y aquellos manejan automóvil.

Sólo camina en paz el avance por muchos caminos, con caminantes que avanzan, cada uno a su estilo y posibilidades.

Sin querer llegar primero, si no sólo con saber llegar.