Ilse Salas más que unos ojos verdes
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México, D.F..- Como una verdadera locura califica Ilse Salas su trabajo en la serie Locas de amor, que se estrenó ayer, en la que nuevamente es dirigida por Francisco Franco.
Desde que comenzó a trabajar sabía que se trataba de un proyecto diferente. En su primer día de lecturas, la actriz sufrió de hepatitis amarilla.
"¡Fue emocionante, pues nunca había hecho nada profesional como actriz! Llegué al primer día de ensayos y estaban Daniel Giménez Cacho, Cecilia Suárez y Ximena Ayala y yo con hepatitis amarilla sin poder tocar a nadie. El médico me dijo que no podía hacer la serie y yo lloraba porque era un proyecto muy interesante.
"Le conté a Francisco Franco y me dijo que asistiera sin tocar a mis compañeros. Así que estaba como apestada en una esquina, viendo el ensayo y el único que me abrazaba era Daniel, porque ya le había dado hepatitis antes, así que no me sentí tan rechazada y comenzó la super aventura", describió Salas.
La serie de 13 capítulos no sólo fue un aprendizaje acerca de las enfermedades mentales y de lo complicado del ser humano, sino que también la llenó de amigos y le abrió otras ventanas hacia nuevos proyectos.
Desde su adolescencia, Ilse Salas tenía el deseo de ser cantante de rock y fue la vocalista de su propia banda: Libélula. Después consiguió un trabajo como cuenta cuentos para niños.
Esta oportunidad le sembró el primer impulso de interpretar a los personajes de las historias que leía. Desde entonces, buscó estudiar actuación y lo hizo en el Foro Teatro Contemporáneo de Ludwik Margules.
Este camino la llevó a conducir, durante cuatro años, la barra de Once Niños.
"Empecé a hacer castings y fue rechazo, tras rechazo, como decirle a un chavo que te gusta y te diga que no, hasta que finalmente me quedé en Locas de amor".
Ilse obtuvo el papel de Sofía, una joven bipolar y maniaco depresiva. Ahora, su rostro de tez blanca y ojos verdes se ve por televisión abierta desde ayer al lado de Cecilia Suárez, Ximena Ayala y Daniel Giménez Cacho.
"En la segunda vuelta del casting hice una escena en la que estaba muy deprimida.
"Me pidieron que bailara como en una clase de aeróbics. ¡Yo con el rimel corrido llorando fatal! Bailé enloquecida y me fui enojada sin despedirme, pero me alcanzaron en la calle para pedir mis datos", relató.
Casi de inmediato en el mismo año, 2009, la actriz encaminó sus pasos hacia el cine. Fue con Demián Bichir, Ana de la Reguera, Miguel Rodarte y el director Antonio Serrano con quienes debutó en este ámbito en el filme Hidalgo que se estrenará con motivo del Bicentenario de la Independencia de México.