Anciana estuvo a punto de tirar a la basura una obra de arte valorada en millones de euros
El pequeño lienzo, titulado “El Cristo burlado”, permaneció por años colgado en su cocina, sin que la familia supiera que tenían entre sus manos una pieza única de la historia del arte.
Una anciana estuvo a punto de deshacerse de un cuadro que resultó ser una valiosa obra del pintor prerrenacentista Cimabue, valorada en más de 20 millones de euros. El pequeño lienzo, titulado “El Cristo burlado”, permaneció por años colgado en su cocina, sin que la familia supiera que tenían entre sus manos una pieza única de la historia del arte.
TE PUEDE INTERESAR: Familia descubre que cuadro de su sala es un Picasso original valorado en millones
Esta obra del siglo XIII, que muestra a Jesús rodeado de figuras armadas en una escena de burla, es una pieza pintada sobre madera de álamo que forma parte de una serie de paneles dedicados a la pasión de Cristo. Sin embargo, durante décadas fue considerada solo un elemento decorativo en el hogar de la anciana, quien falleció sin conocer su verdadero valor.
Cuando los familiares comenzaron a limpiar la casa, estuvieron a punto de tirar el cuadro. Fue entonces cuando una joven tasadora de subastas fue contratada para revisar los bienes del hogar antes de repartirlos entre los herederos. Mientras inspeccionaba la cocina, notó el pequeño cuadro cubierto de años de humo y grasa. Aunque no tenía experiencia extensa, la tasadora siguió su instinto, convencida de que podía tratarse de algo importante.
Un hallazgo que hace historia
Poco después de su descubrimiento, los expertos confirmaron la autenticidad de la obra como uno de los pocos cuadros que quedan del maestro Cimabue, quien es considerado un precursor del arte renacentista. La pieza fue adquirida por el Museo del Louvre, donde ahora es protegida bajo la etiqueta de “Tesoro Nacional” de Francia. Esto garantiza su conservación y reconocimiento dentro del patrimonio cultural francés.
El valor de un ojo entrenado y la preservación del arte
La presidenta del Louvre, Laurence des Cars, ha destacado la importancia de esta adquisición para el museo y para el legado de Cimabue, quien influyó profundamente en el desarrollo de la pintura europea. Este caso demuestra cómo un ojo entrenado y la curiosidad pueden rescatar piezas de gran relevancia histórica y artística.
El cuadro “El Cristo burlado”, valorado en millones, pasó de estar en una cocina olvidada a ser parte de la colección de uno de los museos más importantes del mundo, recordándonos que el arte puede encontrarse en los lugares más inesperados y que cada pieza antigua merece una segunda mirada.