Jesús como protagonista de libros de literatura; recomendaciones para Semana Santa
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Jesucristo no solo es la figura central de varias religiones, también de numerosas obras de ficción escritas por autores como José Saramago, Anthony Burgess, Jorge Luis Borges o Norman Mailer
El tema de la vida y obra de Jesucristo ha sido tratado en pinturas, esculturas, obras de teatro, películas y libros, desde best sellers como el “Código Da Vinci” de Dan Brown, “Operación Jesucristo” de Og Mandino o “Caballo de Troya” de J. J. Benítez, hasta obras literarias escritas por autores de renombre como Oscar Wilde, José Saramago, Anthony Burgess, Jorge Luis Borges o Norman Mailer.
La tentación que han sentido los escritores por tomar la figura de Jesús como un personaje literario, o como fuente de inspiración, tiene una larga historia. Ya en los siglos 16 y 17 se publicaban en España muchas obras literarias sobre la vida del Mesías y, sobre todo, de su Pasión, sin mencionar la extensa obra poética de autores del Siglo de Oro Español como Santa Teresa de Jesús o San Juan de la Cruz. De hecho, Calderón de la Barca escribió dos comedias tituladas “La devoción de la cruz” y “La exaltación de la cruz”.
Más tarde, los rusos Fiódor Dostoyevski y Lev Tólstoi reflejaron su profundo cristianismo en libros como “Los Hermanos Karamazov” o “El Reino de Dios Está en Vosotros”, respectivamente
Y si bien en estos días se habla más de las películas y series que narran la vida de Jesús, y que cada año aparecen en las programaciones televisivas y de streaming, como “Jesucristo Superestrella”, “Ben Hur” o “La Pasión de Cristo”, la literatura también tiene mucho que ofrecer.
Novelas, relatos y cuentos han hallado en la máxima figura del cristianismo a un personaje central de sus tramas o un buen punto de referencia para desarrollar reflexiones o narraciones de tinte histórico.
‘El Evangelio Según Jesucristo’
Es inevitable sonreír cuando se conoce que el autor de un libro protagonizado por Jesús es un hombre ateo y comunista declarado. El portugués José Saramago tiene entre sus obras célebres un retrato entrañable de Cristo, que muestra la infancia, juventud y vida adulta de un hombre atormentado por las dudas y contradicciones.
Publicada en 1991 (ahora cuenta con una nueva reedición en Alfaguara, por el centenario del nacimiento del escritor), en esta novela vemos a un Jesús que le reprocha a su padre que le salvara la vida durante la matanza de Herodes para hacerle morir después, cuando mejor le convenga. Una muerte frente a la cual Cristo, por momentos, se rebela.
‘Rey Jesús’
El escritor Robert Graves hace una suerte de recorrido histórico por la vida de Jesús en la novela que escribió en 1946. El suspenso juega un papel fundamental en la historia desarrollada por el autor, que se centra en el origen humano de Cristo, sus emociones e ideas, y lo muestra como un auténtico descendiente de la realeza israelita.
Graves presenta a Jesús como un heredero legítimo del trono de David, y señala que es hijo natural del matrimonio secreto entre María y Antípater, pues el linaje pasa a través de la línea materna.
El autor deja claro en el “comentario histórico” que se incluye al final del libro, que “cada elemento importante en el relato está basado en alguna tradición, por muy tenue que sea”.
‘La Última Tentación’
Nikos Kazantzakis explora la naturaleza de Cristo, “tan profundamente humana”, que “nos ayuda a comprenderlo, amarlo y a seguir su Pasión”, en su controversial novela “La Última Tentación”, publicada en 1953 y que después dio paso a la película de Martin Scorsese en 1988.
El escritor, filósofo y traductor griego se vale de la imaginación para entregar al lector la imagen de un Jesús que, como cualquier hombre, desea la felicidad personal y se ve tentado por la posibilidad de amar a una mujer, casarse y tener hijos. Este atisbo a lo que podría ser su futuro, es a fin de cuentas una visión fugaz, que rechaza cuando elige seguir el camino hacia el Calvario y morir en la cruz para redimir a los hombres.
Kazantzakis, quien escribió, además, “Jesucristo de Nuevo Crucificado”, muestra a Judas como un elemento más del plan de Dios para sacrificar a su hijo. Es Jesús quien invita a su discípulo a traicionarlo y sin él, la crucifixión tal vez no hubiera sido posible.
‘Jesucristo y el Juego del Amor’
Anthony Burgess creció en el seno de una familia católica, por ello no es de extrañar que haya decidido explorar la vida de Jesucristo desde el punto de vista literario en su novela “Jesucristo y el Juego del Amor”, escrita en 1978, así como en el guion de la miniserie “Man of Nazareth”, transmitida en 1979.
“Desde el punto de vista biográfico, todo está dicho, todo se ha dicho en los evangelios. Mi objetivo principal ha sido caracterizar bien el personaje de Cristo y a los de los discípulos”, expresó alguna vez el escritor en referencia a su novela.
El Cristo que retrata el autor de “La Naranja Mecánica”, a diferencia de muchos escritores, es un hombre culto, cosmopolita, fuerte y consciente de su condición divina, que actúa de acuerdo a las profecías establecidas. Si bien este nazareno sí se casa –de hecho, las Bodas de Caná es el relato de sus propias nupcias–, enviuda poco tiempo después y es entonces que se dedica a la tarea de su vida: salvar a la raza humana.
‘El Evangelio Según el Hijo’
El norteamericano Norman Mailer creó su propia obra, escrita en primera persona, sobre la vida de Jesús, en un tono “ni piadoso ni satírico”. El autor plantea la existencia de un texto escrito por el propio Cristo, un hombre de carne y hueso, que busca dejar la constancia real de su paso por el mundo.
Mailer, judío de Brooklyn y educado en la tradición laica, siempre sintió una pasión especial por la Biblia, a la que consideraba una pieza literaria excepcional, así como hacia Jesús, que a su entender era un héroe evangélico mal explicada.
El personaje descrito por el autor de “La Canción del Verdugo” es un hombre talentoso, compasivo, con sentido del humor, pero que carga en sus espaldas dudas sobre su tarea en el mundo.
Publicada en 1997, la novela trata de acercar al lector a un ser capaz de prodigios inimaginables, pero al mismo tiempo angustiado por su papel en el destino de los seres humanos.
‘Evangelia’
La virgen María, siguiendo un designio divino, dio a luz, pero en lugar de alumbrar al varón que esperaban todos, parió a una mujer. Será ella, Emanuel, la que deberá llevar a cabo el plan de Dios: predicar la palabra, hacer milagros, salvar a los hombres y morir en la cruz. Sobre este argumento narrativo gira la novela de David Toscana, “Evangelia” (Alfaguara, 2016), una obra que invita al lector no sólo a adentrarse en la ficción, también a leer la Biblia con ojos distintos.
El autor considera que, si no existieran los evangelios, ni Cristo, ni la religión, “de cualquier forma esta novela podría sostenerse por sí misma porque tienes un personaje quijotesco que cree que tiene que luchar por los hombres, que termina en la cruz. Y finalmente creas personajes que se enfrentan a envidias, en este caso, las mujeres enfrentan al machismo, tienes muchas facetas más allá de las religiosas”.
‘Jesús y Yahvé. Los Nombres Divinos’
Mención especial merece el estadounidense Harold Bloom, quien publicó en 2005 su libro de ensayos “Jesús y Yahvé. Los Nombres Divinos”, en el que muestra a ambas figuras como personajes literarios y las enfrenta con las de Hamlet y el Quijote, entre otras.
Cuando recién salió este libro, el crítico afirmó, en una entrevista con el diario español El País, que “el autor del Evangelio según San Marcos fue un pésimo escritor, de los peores de la historia, aunque tenía una gran imaginación”.
Sin embargo, el autor de “El Canón Occidental”, le concede al evangelista el mérito de haber creado un gran personaje pues “El Jesús de san Marcos está lleno de dudas, duda de su propia condición”.