“Las historias de África suelen contarse desde afuera”: Lupita Nyong'o
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El film de la realizadora Mira Nair cuenta la historia de Phiona Mutesi, una niña de 9 años sin estudios y que vendía maíz en las calles de Kampala y gracias a un profesor de fútbol y ajedrez pudo convertirse en campeona nacional de ajedrez de su país.
Desde su papel como esclava en "12 Years a Slave", de Steve McQueen, que le valió el Oscar a la mejor actriz de reparto en 2014, Lupita Nyong'o vivió un rápido ascenso a la fama e incluso se convirtió en uno de los íconos de moda más importantes de Hollywood.
Recientemente se la pudo ver en "Star Wars: The Force Awakens", mientras que en "El libro de la selva", de Disney, prestó su voz a la madre de Mowgli, la loba Raksha. Ahora, Nyong'o vuelve a interpretar a una madre en la nueva película de Disney "The Queen of Katwe", que tuvo su estreno mundial en el Festival de Toronto.
El film de la realizadora Mira Nair cuenta la historia de Phiona Mutesi, una niña de 9 años sin estudios y que vendía maíz en las calles de Kampala y gracias a un profesor de fútbol y ajedrez que trabajaba con niños humildes en Katwe, Robert Katende, pudo convertirse en campeona nacional de ajedrez de su país.
Nyong'o interpreta en el film a su inquebrantable madre, una mujer muy humilde y sin estudios pero con una voluntad de hierro para sacar adelante sola a sus cinco hijos. En entrevista con dpa y un reducido grupo de medios, la actriz nacida en México pero criada en Kenia, de donde son oriundos sus padres, habló sobre el desafío que supuso este papel para ella:
dpa: ¿Cómo fue esta experiencia de interpretar a una mujer muy humilde que lucha incansablemente por sus hijos?
Nyong'o: "El papel me resultó muy atractivo porque era muy diferente de mi propia vida y mi visión del mundo. Me crié en una familia en la que mis padres apoyaban mucho los sueños y la imaginación, de hecho crearon un ambiente que hiciera eso posible. Y aquí hay una mujer, Harriet, a la que la vida no trató muy bien y que tiene miedo de soñar porque eso sólo le genera desilusiones. Harriet fue madre a los 15 y en la película está a principios de sus 30. Prepara a su familia para esa lucha porque eso es lo que conoce. Sin embargo, sabe que para demostrarle su amor a su hija le debe dar libertad y arriesgarse a fracasar".
dpa: Más allá de los problemas muy concretos que conlleva la pobreza (hambre, viviendas precarias, falta de educación), ¿está de acuerdo en que el principal desafío es superar la idea de que no se merece nada mejor?
Nyong'o: "Cuando te dicen 'perteneces a donde crees que perteneces', es algo muy cierto. Lo que pasa en sitios de extrema pobreza es que te dicen que no perteneces a ninguna parte, estás en un ambiente que te está diciendo constantemente que no vales mucho. Y que aparezca alguien como Robert Katende, que genere confianza en tí mismo, que te permita hacerte avanzar en circunstancias adversas, es una gran cosa. La historia de Phiona Mutesi es real, no es producto de la imaginación de nadie, y esta chica se ha convertido en un orgullo para su país porque alguien creyó en ella. Por eso espero que esta película inspire a todos a quienes les tocaron las cartas más difíciles en la vida".
dpa: ¿Qué cree que aportó la directora Mira Nair, que vive en Uganda hace casi 30 años, a la manera de contar la historia?
Nyong'o: "No se me ocurre nadie mejor para hacer la película en la forma en que la hizo Mira. Ella ama al país, lo conoce desde dentro. En general, las historias sobre África se suelen contar desde afuera, desde la perspectiva de un 'outsider', y los africanos son como el telón de fondo, no se centran en lo que les pasa a ellos. Mira hizo un trabajo increíble enfocando la historia no solo en los africanos, sino en la niña. Porque hay otra versión de la historia, que hubiera estado centrada en su mentor. Eso es muy inspirador para los niños que se están criando en circunstancias similares, porque les transmite que tienen algo que ofrecerle al mundo. Y amo a Mira por eso.
dpa: Usted tuvo la oportunidad de conocer a la verdadera Harriet, la madre de Phiona. ¿Es como la de la película?
Nyong'o: "Tuve la suerte de poder sentarme a hablar con la verdadera Harriet, algo que para mí no tiene precio. Y eso es lo que encontré en ella: una dignidad tranquila. Me recuerda a un baobab, esos árboles muy grandes que se encuentran en áreas muy áridas y que almacenan agua que les permite sobrevivir en circunstancias extremas. Es muy cauta, muy observadora, es protectora... tiene ese tipo de nobleza.
dpa: ¿Y quién creyó en Lupita Nyong'o para que llegara hasta aquí?
Nyong'o: "Mis padres siempre creyeron en mí. Yo no era una niña que jugara afuera; me encerraba en cuarto y jugaba ahí dentro. Mi mamá no paraba de decirme 'vuelve a la tierra'. Pero mis padres siempre apoyaron mis sueños, más bien mi familia en general. Cuando tenía 13 años una de mis tías me dijo: 'Deberías ir a un casting que hay acá en Nairobi'. Quizá sin eso nunca hubiera sabido que tenía talento".
dpa: ¿Cuál fue el papel de su propia madre?
Nyong'o: "A los 14 años me tomaron para 'Romeo y Julieta' en teatro. Mi madre me llevaba todos los días al ensayo, después de la escuela, y se quedaba sentada en el auto hasta que terminara para llevarme a casa. Sin ese apoyo no habría llegado aquí. Ahora mis padres me van a acompañar al estreno mundial de la película en Uganda. Mi madre ha estado en todas mis 'premieres', llueva o truene (risas)".
dpa: ¿Se hablaba de temas sociales y políticos en su hogar?
Nyong'o: "Me crié en un hogar con sentido social y los temas mundiales no me eran ajenos. Mi padre era político y nosotros éramos como su oasis. Cuando llegaba a casa no quería traer su trabajo consigo, así que nos leía 'Otelo' de Shakespeare en voz alta o nos contaba historias de su infancia. Tengo una relación muy íntima con mi padre y sé que soy la luz de sus ojos. Todos lo somos, los seis hermanos. Yo lo veía hablar frente a muchas personas y me asombraba su uso del idioma ingés, del swahili. Espero estar a la altura de su legado”.