Contiene la Vía Láctea hasta 100 mil millones de estrellas enanas marrones
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Las enanas marrones son demasiado grandes como para ser planetas, pero demasiado pequeñas como para producir las reacciones de fusión nuclear en su interior que hacen que brillen las estrellas.
La Vía Láctea contiene entre 25,000 y 100,000 millones de enanas marrones, estrellas incapaces de brillar, según indicaron hoy un grupo de investigadores internacionales en el congreso anual de astronomía en la Universidad de Hull, en Reino Unido.
Esa es la conclusión a la que llegó el equipo de investigadores de Aleks Scholz, de la Universidad de St. Andrews (Escocia) y de Koraljka Muzic, de la Universidad de Lisboa, tras analizar determinados cúmulos de estrellas.
Las enanas marrones son demasiado grandes como para ser planetas, pero demasiado pequeñas como para producir las reacciones de fusión nuclear en su interior que hacen que brillen las estrellas.
Estos objetos celestes son un subproducto del proceso normal de nacimiento de una estrella y brillan solo ligeramente por la elevada temperatura que desprenden durante su formación. Por esta razón son muy difíciles de detectar. Las primeras fueron descubiertas en 1995.
Dado que son tan difíciles de encontrar, la mayoría de las enanas marrones descubiertas hasta ahora están en la Vía Láctea y, como mucho, a 1,500 años luz de distancia. Un año luz es la distancia que recorre la luz en un año. Nuestra galaxia, la Vía Láctea, tiene un diámetro de unos 100,000 millones de años luz.
El equipo de Muzic y Scholz buscó de forma sistemática enanas marrones en regiones de formación de estrellas. Así los astrónomos descubrieron que el cúmulo de estrellas catalogado como NGC 1333, a 1,000 años luz, tiene la mitad de enanas marrones que de estrellas auténticas.
El estudio de un segundo cúmulo (el RWC 38), con unas condiciones muy diferentes, llegó a los mismos resultados, por lo que los astrónomos concluyen que esta proporción es universal.
"Independientemente del tipo de cúmulo, las enanas marrones son muy comunes", señala Scholz en un comunicado de la Real Sociedad Astronómica británica. "Las enanas marrones se forman junto a las estrellas en cúmulos, por eso nuestro estudio sugiere que ahí fuera hay un número enorme de enanas marrones".
Los investigadores han presentado sus resultados para su publicación en "Monthly Notices", de la Real Sociedad Astronómica.