Las reformas constitucionales de los últimos 45 días y el discurso lineal de Sheinbaum, no ayudan a la generación de incentivos para que las inversiones vean a México como su principal plataforma de exportación para EU
A pesar de las advertencias nacionales y extranjeras, el presidente Andrés Manuel López Obrador ha mantenido su línea discursiva, maniquea, sin dar un ápice a la discusión y al debate
A riesgo de caer en la irrelevancia por no hacerlo, necesitamos invertir en la educación, la salud y la seguridad social de nuestra propia gente, así como en tecnologías digitales, ciencias de la vida y transición energética
El Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) cumplió el viernes pasado dos años como motor para la economía mexicana, del que saca provecho en las exportaciones hacia Norteamérica.
Pero hasta finales de febrero, cuatro años después de llegar a un principio de acuerdo sobre la parte comercial, el Gobierno de México no había recibido formalmente la propuesta.