Nitazenos, una droga 10 veces más potente que el fentanilo ya lleva más de 20 muertes en EEUU.
En medio de esta crisis, es fundamental explorar todas las opciones disponibles para combatir el uso indebido de sustancias y proteger la salud y el bienestar de la población.
La alarmante proliferación de una droga mucho más potente que el fentanilo, conocida como nitazenos, está causando estragos en Estados Unidos. Estos compuestos, que pueden ser hasta mil veces más potentes que la morfina y diez veces más potentes que el fentanilo, han surgido como una nueva y peligrosa amenaza en medio de la devastadora epidemia de opioides que asola el país.
La crisis de los opioides en Estados Unidos ha alcanzado proporciones catastróficas, con el fentanilo como principal culpable de un alarmante número de muertes por sobredosis. Las estadísticas son espeluznantes: se estima que en 2024, una persona fallece cada cinco minutos debido a esta crisis. En las grandes ciudades, las calles se han transformado en escenarios desoladores, con áreas enteras convertidas en lo que se ha denominado “barrios zombies”, donde los adictos deambulan sin rumbo y apenas conscientes de su entorno.
Sin embargo, la situación se ha vuelto aún más sombría con la aparición de los nitazenos. Estos compuestos, desarrollados originalmente en la década de 1950 por la multinacional suiza CIBA como analgésicos opioides, nunca llegaron a ser aprobados para su comercialización. No obstante, han resurgido en las calles de Estados Unidos desde 2021, causando estragos con más de 2,000 muertes por sobredosis en todo el mundo.
Los expertos están profundamente preocupados por los nitazenos, y con justa razón. Según una reciente revisión científica realizada por investigadores estadounidenses, estos compuestos son “de cientos a miles de veces más potentes que la morfina y otros opioides, y diez veces más potentes que el fentanilo”. Además, la falta de información sobre cómo reacciona el cuerpo humano ante los nitazenos, debido a la ausencia de ensayos clínicos, agrava aún más el riesgo asociado con estas sustancias.
Lo más inquietante es la variedad de formas en que los nitazenos están llegando al mercado ilegal. Desde su aparición inicial como un polvo blanco similar a la cocaína en 2019, hasta su transformación en polvos amarillos, marrones y blancos, así como en pastillas azules. Estas sustancias también se están combinando con otras drogas, como heroína, fentanilo y benzodiacepinas, lo que hace que sus efectos sean aún más impredecibles y peligrosos.
Los síntomas de toxicidad de los nitazenos son similares a los de otros opiáceos e incluyen pupilas reducidas, ralentización del sistema respiratorio y del sistema nervioso central, lo que puede llevar a la muerte por sobredosis.
Ante esta grave amenaza, es crucial tomar medidas urgentes para abordar el problema de los nitazenos. No solo se necesita una mayor conciencia entre los profesionales de la salud y las autoridades públicas, sino también educación y prevención dirigidas a los consumidores. Además, es imperativo desarrollar estrategias de tratamiento efectivas para revertir las sobredosis y proporcionar atención médica rápida a aquellos que se ven expuestos a estas sustancias mortales.
En medio de esta crisis, es fundamental explorar todas las opciones disponibles para combatir el uso indebido de sustancias y proteger la salud y el bienestar de la población.
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