¿Tengo que deshacerme de mi espátula negra de plástico?
Hay que tirar los artículos de plástico negro que estén astillados o abollados, para evitar el riesgo de que fragmentos de plástico contaminen los alimentos.
Por: Emily Schmall
P: Tengo unos cuantos utensilios de plástico negro en el cajón de la cocina, pero he leído que son peligrosos. ¿Es cierto?
Titulares recientes han instado a la gente a deshacerse inmediatamente de cualquier objeto de plástico negro que haya en sus casas, advirtiendo que podrían contener sustancias químicas tóxicas.
Un estudio publicado en octubre en la revista Chemosphere dio pie a muchos de estos informes. En él se descubría que algunos de estos artículos, como espátulas, bandejas de sushi para llevar y juguetes infantiles, podían contener retardantes de llama.
Pero saber si representan un riesgo para la salud es una cuestión más compleja. Estudios anteriores han demostrado que los retardantes de llama pueden filtrarse de los plásticos, especialmente cuando se calientan. Aunque la exposición a niveles elevados de estas sustancias químicas se ha relacionado con efectos graves para la salud, no está claro en qué medida un artículo doméstico concreto aumenta el riesgo.
¿Y por qué hay retardantes de llama en las espátulas?
Los fabricantes empezaron a añadir retardantes de llama a productos como televisores y computadoras en la década de 1970 para frenar la propagación del fuego. Pero las empresas han tenido que eliminarlos progresivamente, ya que estudios realizados en las dos últimas décadas han demostrado que son tóxicos y pueden ser cancerígenos para los animales y los seres humanos a altos niveles de exposición. Sin embargo, algunas de estas sustancias químicas han reaparecido en artículos domésticos de plástico fabricados con residuos electrónicos reciclados, puesto que la normativa que limitaba el uso de ciertos retardantes de llama no se aplicaba a estos materiales.
El hecho de que las sustancias químicas prohibidas hayan aparecido en productos domésticos demuestra que “pueden afectarnos por segunda vez si no tenemos cuidado”, dijo Joseph Allen, profesor de salud ambiental de la Universidad de Harvard, quien ha estudiado los riesgos para la salud de los retardantes de llama.
La gente no puede saber qué artículos de plástico negro pueden contener retardantes de llama, pero en el nuevo estudio, los investigadores encontraron estas sustancias químicas en 17 de los más de 200 productos domésticos que analizaron. Se descubrió que algunos productos contenían decaBDE, un retardante de llama relacionado con el cáncer que la Agencia de Protección del Medio Ambiente prohibió en 2021 basándose en estudios que habían demostrado que era peligroso para la salud humana.
¿Cuáles son los riesgos de la exposición para la salud?
Algunos estudios en animales y en humanos han relacionado la exposición a los retardantes de llama con mayores riesgos de cáncer, alteraciones endocrinas y efectos sobre la salud reproductiva y el neurodesarrollo.
Un estudio publicado a principios de este año reveló que las mujeres embarazadas expuestas a estas sustancias químicas por su uso en electrónica, textiles y materiales de construcción tenían un mayor riesgo de parto prematuro. Otros estudios han demostrado que los hijos de mujeres expuestas a altos niveles de retardantes de llama durante el embarazo tenían más probabilidades de sufrir déficits de desarrollo neurológico más adelante.
Algunas de estas sustancias químicas, como los éteres difenílicos polibromados (PBDE), también han sido relacionadas con un mayor riesgo de enfermedad tiroidea.
Los mecanismos exactos de estos efectos no están claros. Una teoría es que la estructura de estas sustancias químicas es tan parecida a la de las hormonas tiroideas que puede provocar un mal funcionamiento de la tiroides.
“Las enfermedades tiroideas son cada vez más frecuentes entre la población estadounidense y nadie sabe realmente a qué se deben”, dijo Heather Stapleton, química medioambiental de la Universidad de Duke. “Pero se cree que las exposiciones ambientales podrían estar desempeñando un papel”.
Aún así, los científicos deben responder a una serie de preguntas, como qué niveles de exposición provocan los efectos más graves para la salud y qué grado de riesgo puede entrañar el uso cotidiano de artículos de plástico negro.
El nuevo estudio, que fue realizado por el grupo de defensa del consumidor Toxic-Free Future, basó sus estimaciones de los niveles de toxinas en la investigación publicada en un documento de 2018. Ese estudio puso a prueba de estrés utensilios con la mayor concentración de retardantes de llama sumergiéndolos en aceite de cocina caliente durante 15 minutos. Stuart Harrad, profesor de química ambiental en la Universidad de Birmingham y uno de los autores del estudio, describió ese método de cocción como el “peor de los casos posibles”.
Pero “en condiciones normales de uso, es muy poco probable que estas sustancias químicas lleguen a los alimentos que se cocinan en niveles significativos que deban preocuparnos”, dijo Allen.
¿Debo tirar estos productos para estar seguro?
Dada la incertidumbre científica, no todos los expertos están de acuerdo en que no sea seguro utilizar estos productos. Pero sí están de acuerdo en que hay que tratarlos con cuidado.
Los expertos sugieren que se evite dejar los utensilios de plástico en ollas o sartenes calientes. También aconsejaron no recalentar alimentos en recipientes de plástico negro, y dijeron que hay que tirar los artículos de plástico negro que estén astillados o abollados, para evitar el riesgo de que fragmentos de plástico contaminen los alimentos.
Megan Liu, responsable de ciencia y política de Toxic-Free Future, reconoció que era difícil evitar por completo el plástico negro, pero dijo que era posible minimizar la exposición. Ella sigue comprando sushi para llevar, por ejemplo, pero lo transfiere de la bandeja de plástico negro a un plato una vez que llega a casa, dijo.
Stapleton dijo que utilizaba una cuchara de madera y utensilios metálicos para cocinar. Pero sigue utilizando una espátula de plástico negro para cocinar los huevos como a ella le gusta y evitar rayar su sartén antiadherente. “Todo con moderación”, dijo.