Los hombres decidirán si hay embarazo o no, con un “interruptor” que bloquea el esperma
Desarrollado en Alemania por Clemens Bimek, el método anticonceptivo consiste en una pequeña válvula de 18 milímetros que se adhiere a la zona de los conductos espermáticos para evitar que continúen su flujo rumbo a los testículos y se mezclen con el líquido seminal. Esperan comercializarlo en 2018
México DF.- Con solo subir o bajar el “switch”, los hombres podrán ser capaces de decidir si en sus relaciones sexuales habrá o no la posibilidad de un embarazo sin necesidad de tomar medicamentos o someterse a un método anticonceptivo irreversible como es la vasectomía.
Desarrollado en Alemania por Clemens Bimek, el método anticonceptivo consiste en una pequeña válvula de 18 milímetros que se adhiere a la zona de los conductos espermáticos para evitar que continúen su flujo rumbo a los testículos y se mezclen con el líquido seminal. Eso, siempre y cuando quien la porte decida “bajar el switch”. En caso contrario, su vida reproductiva no será afectada.
Bajo el nombre de Bimek SLV, dicha válvula es implantada a través de una cirugía menor, que sólo requiere de 30 minutos para ser completada y anestesia local, por lo que el individuo podrá reincorporarse a sus actividades cotidianas al día siguiente.
Si bien continua en proceso de investigación, y hasta el momento sólo ha sido probada en una sola persona, Clemens Bimek ha señalado que a través de una campaña de recaudación de fondos buscará continuar con los procesos de comprobación de efectividad en más hombres a fin de que para 2018 esté disponible en el mercado y sea el primer anticonceptivo masculino no permanente, libre de utilización de hormonas, anti alergénico y no probado en animales.
Asimismo, aclara que este método no provoca esterilidad, ya que bloquear los conductos espermáticos no implica el cese de la producción de espermatozoides.
El debate científico
Hasta el momento, la comunidad científica alemana ha emitido opiniones divididas en torno al dispositivo. Por un lado, urólogos como Hartwig Bauer, quien estuvo a cargo de la cirugía realizada a Bimek, ha señalado que un tercio de los hombres que se han practicado la vasectomía han externado su deseo de revertirla, por lo que es mejor utilizar un método que no tenga un carácter irreversible.
Por su parte, Wolfgang Buehmann, vocero de la Asociación Alemana Profesional de Urología, ha referido que la implantación de la válvula puede provocar cicatrices donde se conjunta con los conductos deferentes.
Además, ha señalado que se debe revisar si con el paso del tiempo no se obstruye el paso de espermatozoides por la válvula a pesar de estar abierta.