‘Es un faracaso la política de combate al crimen organizado de la 4T’, dice diputado federal por Coahuila
Tras seis años de la implementación de la estrategia de seguridad del gobierno de Morena, el diputado federal por Coahuila, Rubén Moreira Valdez afirmó que la política de combate al crimen organizado ha fracasado. El legislador denunció que la reciente muerte del alcalde de Chilpancingo, Alejandro Arcos, es un acto de terrorismo que siembra miedo entre la población y evidencia la debilidad del Estado.
En su programa “Con peras, manzanas y naranjas”, acompañado por el economista Mario Di Costanzo y el abogado Miguel Ángel Sulub, Moreira subrayó la falta de estabilidad y gobernabilidad en Guerrero, cuestionando la vigencia del Estado de derecho en la entidad. Ante esta situación, propuso destinar fondos en el próximo presupuesto para la creación y fortalecimiento de cuerpos policiales municipales y estatales, con un programa de seguridad especial para estos agentes.
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ANÁLISIS DE LA ESTRATEGIA DE SEGURIDAD
Al referirse a la Estrategia Nacional de Seguridad presentada recientemente por el Gobierno Federal, el legislador señaló que el eje más relevante es la coordinación con los estados, ya que en administraciones anteriores no se buscó el diálogo con los gobernadores. “Ahora se dice que van a trabajar coordinados, pero el reto será materializarlo”, apuntó.
Moreira también criticó el resto de los ejes, como el fortalecimiento de la inteligencia y la Guardia Nacional. Aseguró que la inteligencia ha sido siempre un recurso presente en las instituciones de seguridad, y cuestionó el enfoque de atención a las causas, advirtiendo que “tratar la pobreza como causa del crimen podría estigmatizar a los más vulnerables”.
Respecto a la Guardia Nacional, el legislador priista destacó que en seis años ha permanecido bajo control de la Secretaría de la Defensa Nacional, lo que no ha impedido que el País atraviese uno de los periodos más violentos de su historia, con más de 200 mil homicidios en el sexenio anterior. “Hoy Colima es el estado más violento por cada 100 mil habitantes, lo que refleja la gravedad del problema”, sentenció.
Aunque reconoció las capacidades del actual Secretario de Seguridad, Moreira subrayó que “la falta de fuerza operativa a su disposición limita su efectividad, pues el control sigue concentrado en el Ejército”.
FALTA DE GOBERNABILIDAD Y HERRAMIENTAS
El economista Mario Di Costanzo coincidió con Moreira en que el asesinato del alcalde de Chilpancingo envía un mensaje claro del crimen organizado ante la ausencia de gobernabilidad y seguridad en la entidad. Además, advirtió sobre el posible secuestro del Estado por parte del crimen organizado, no solo en Guerrero, sino en diversas regiones del País.
“El problema es que no hay policías suficientes en los estados, y el Gobierno carece de un diagnóstico serio para enfrentar esta crisis”, aseveró Di Costanzo.
Por su parte, el abogado Miguel Ángel Sulub expresó su esperanza en que la nueva estrategia de seguridad logre restaurar la paz en México y frenar los homicidios que se registran a diario. Sin embargo, advirtió que, en los primeros 10 días del nuevo gobierno, ya se superó la cifra de 800 asesinatos, lo que refleja la magnitud del desafío.
Sulub concluyó que, aunque el secretario de Seguridad tiene buenas intenciones, “no cuenta con los recursos ni los elementos necesarios para implementar una estrategia eficaz”, por lo que existe el riesgo de que el plan de seguridad termine siendo solo una “carta de buenas intenciones”.
LA URGENCIA DE UN NUEVO RUMBO EN SEGURIDAD
Ante este complejo panorama, Rubén Moreira insistió en la importancia de un replanteamiento integral de la estrategia de seguridad. “Es indispensable fortalecer las policías locales y garantizar su profesionalización mediante recursos adecuados. Sin ello, el País continuará a merced de la violencia y el crimen organizado”, concluyó el legislador.
La discusión en torno a la seguridad sigue en el centro del debate nacional, mientras la ciudadanía demanda resultados concretos para recuperar la paz y la estabilidad en México.
